Imagina que en el mundo existiera un templo dedicado a una de las partes femeninas que más les gusta a los hombres, un santuario en donde lo senos son adorados, en donde existen ofrendas para admirar su belleza.
Pues esto ya no es un sueño, es toda una realidad, en Japón existe un lugar donde lo senos son adorados y venerados tal y como si habláramos de un dios.
De acuerdo rinconabstracto.com, este templo fue construido en 1678 en un pequeño pueblo de Soja, en la Prefectura japonesa de Okayama, ahí tienen un pequeño altar llamado Karube Jinja.
Comenzó siendo un lugar para recibir las necesidades espirituales de la población local. Sin embargo, a partir de finales del siglo 17, los visitantes notaron que un Sauce Llorón vecino "lloraba" más de lo normal.
Entonces se le asoció rápidamente con el proceso de amamantar, y las mujeres empezaron a acudir con el deseo de pedir más leche para darles pecho a sus bebés.
La voz se corrió, al punto de que visitar este lugar se hizo una tradición y las japonesas comenzaron a organizar multitudinarias peregrinaciones.
A pesar de que el sauce original se murió en los años 40, hoy en día el lugar se mantiene como un altar, al que turistas y locales asisten para dejar ofrendas y amuletos con formas de senos de todos los tamaños, los cuales son exhibidos en las paredes del santuario.