«Breaking Bad» se despidió definitivamente de su aventura en televisión ganando la noche del lunes el Emmy al Mejor drama, un premio que ya logró el año pasado, y repartiendo estatuillas entre sus protagonistas, durante una gala celebrada en Los Ángeles.
«Modern Family», de su lado, fue de nuevo imbatible y marcó un hito al llevarse por quinta vez consecutiva el título a la Mejor comedia, igualando el récord que tenía la serie de los 90 «Frasier».
Las mayores decepciones corrieron a cargo de «Juego de tronos», que una vez más se fue con las manos vacías, y «True Detective», protagonizada por Matthew McConaughey, que había despertado gran expectación desde su estreno en enero.
El elenco de Breaking Bad recibe el premio al mejor drama. AP
Netflix corrió la misma suerte con «House of Cards» y «Orange Is The New Black», que tampoco obtuvieron ninguno de los premios principales a los que optaban.
El protagonista de «Breaking Bad», Bryan Cranston, se fue a casa con su cuarto Emmy al Mejor actor gracias a su personaje de Walter White, un profesor de química con cáncer terminal que se convierte en productor de metanfetaminas para garantizar el bienestar de su familia.
«Amo actuar, es mi pasión y lo seguiré haciendo hasta mi último aliento», prometió el actor al recoger su estatuilla, mientras recibía una de las ovaciones más fuertes de la ceremonia celebrada en el teatro Nokia.
Sus compañeros Paul Aaron y Anna Gunn fueron de nuevo reconocidos como Mejores actores de reparto por encarnar respectivamente al socio y a la esposa de White.
«Es una maravillosa despedida», dijo el director ejecutivo Vince Gilligan tras revalidar el premio a Mejor drama. La serie emitió su último capítulo en septiembre de 2013.
Julianna Margulies se impuso como Mejor actriz dramática por «The Good Wife», que narra el giro que da la vida de un político encarcelado por corrupción, un premio que ya ganó en 2011.
«Modern Family» suma y sigue
El equipo al completo de «Modern Family» subió por quinta vez a recoger el título de Mejor comedia, un récord que hasta ahora sólo había alcanzado la serie de los 90 «Frasier».
El programa basado en una familia del siglo XXI también sumó el Emmy al Mejor actor de reparto para Ty Burrell y Mejor director para Gail Mancuso.
La colombiana Sofía Vergara tuvo su momento de gloria al posar sobre una plataforma giratoria y hacer gala de sus curvas mientras el presidente de la Academia de Televisión, Bruce Rosenblum, pronunciaba su discurso.
Ante la controversia que suscitó por ser considerada sexista, la actriz aclaró que «alguien puede ser guapo y al mismo tiempo ser divertido y reírse de sí mismo».
Jim Parsons dedicó a su padre fallecido su cuarto Emmy al Mejor actor por interpretar al hilarante científico y ególatra Sheldon Cooper en la comedia»The Big Bang Theory».
Uno de los momentos más aplaudidos de la ceremonia fue cuando Cranston sorprendió con un apasionado beso a Julia Louis-Dreyfus, que iba a recoger su estatuilla a Mejor actriz de comedia por «Veep».
Cranston y Louis-Dreyfus eran compañeros de reparto en la comedia de los años 90 «Seinfeld», donde el entonces desconocido actor compartió con «Elaine» algunos besos de ese calibre.
«Fargo» fue reconocida como la Mejor miniserie, mientras que «The Normal Heart», sobre la lucha contra el sida en la década de los ’80, fue galardonada con el premio a Mejor película de televisión.
Robin Williams en la memoria
El actor Billy Crystal fue el encargado de rendir homenaje a su compañero Robin Williams, fallecido hace dos semanas y quien dio sus primeros pasos artísticos en la televisión.
«Era la estrella más brillante de la galaxia de la comedia y su bella luz seguirá brillando en nosotros para siempre», dijo Crystal, que coprotagonizó con él «Father’s Day» en 1997.
La gala estuvo salpicada de bromas que hicieron reír al público, como cuando el presentador de televisión Jimmy Kimmel preguntó por qué el actor Matthew McConaughey estaba en una entrega de premios de televisión o cuando Ricky Gervais ofreció un discurso simulando haber conquistado algún premio.
Las estrellas de la pequeña pantalla lucieron espectaculares diseños: Taylor Schilling («Orange Is The New Black») llegó envuelta en pedrería, Anna Chlumsky («Veep») con un sobrio vestido blanco y Hayden Panettiere («Nashville») con vertiginoso escote hasta su abultada barriga embarazada.
Los hombres también demostraron su gusto por la moda, como Jesse Tyler Ferguson («Modern Family») y Jim Parsons con clásicos esmoquins; o McConaughey, tal vez el más original con esmoquin azul con las solapas, la camisa y la pajarita negras.
Lena Dunham («Girls») causó un revuelo de críticas en las redes sociales con su cabello platinado y un vestido de Giambattista Valli rosa y rojo, en capas de tul como un tutú hasta el suelo.
Fuente [Losandes.com.ar]