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La idea de la colonización en otros planetas ha sido un sueño recurrente desde los libros de la ciencia ficción, actualmente se ha visto afectada con los costos de los viajes espaciales haciendo poco probable enviar una misión tripulada hacia Marte en los próximos años.
Las agencias espaciales tienen en la mira una especie de gusano microscópico llamados Caenorhabditis Elegans, los cuales tienen similitudes biológicas con los humanos y son estudiados por la Universidad de Nottingham en el Reino Unido para ver cómo son afectados en los viajes de larga duración en el espacio.
Entre los años 2006 y 2009, algunos de estos microorganismos fueron enviados a la órbita terrestre a través del Transbordador Espacial “Discovery”, al ser analizados encontraron que esta especie se desarrolló e incluso pudo dejar descendencia al igual que en la Tierra.
La idea de enviar esta clase de gusanos al planeta rojo será la misma que en las pasadas misiones, estudiando su adaptación en un largo viaje donde se estarán sujetos a la ausencia de gravedad así como otras radiaciones cósmicas.
También se analizará si son capaces de sobrevivir e incluso reproducirse en condiciones adversas monitoreando su estado de salud, detectando cambios en su desarrollo y reproducción así como su comportamiento de acuerdo a las condiciones ambientales del lugar.
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En esencia, el C. Elegans resulta una opción viable en el estudio de los efectos biológicos en el espacio profundo, como si se tratara de una especie de semilla espacial.