En mis tiempos mozos de estudio comprobé que había dos tipos de estudiantes, los que utilizaban subrayadores en los libros y los que no. Ahora puede que el dilema sea usar libros físicos o no, pero al menos ya no tendrás que elegir si subrayar es echar un libro a perder o no gracias a Fader. Se trata de un subrayador fosforito de los de toda la vida, con la particularidad de que su marca desaparece a los 5 meses.
Según sus creadores, su principal motivo de existencia es el hecho de permitir subrayar como siempre y luego poder vender los libros sin problemas como si fueran nuevos.
Claro que, existen dos problemas fundamentales relacionados con los 5 meses que dura la tinta. El primero es que como suspendas en Febrero, mientras llega Septiembre te has quedado sin manera de repasar tus marcas.
El segundo es que muchos estudiantes quieren comprar justamente libros que ya estén marcados para “ahorrarse” tener que hacerlos ellos mismos.
Total, que no sé si tiene mucho sentido o no, tal vez si la tinta durara 9 meses o un año entero sería bastante mejor, y al menos no te obligaría a repetir subrayamientos de manera paranoica durante el curso por miedo a que al día siguiente desaparezca todo.