Cupido pone a su disposición la tecnología móvil

Ciertamente las formas de seducir a Julieta que tenía Romeo nada tienen que ver con los actuales métodos de conocer gente y de interactuar con el sexo opuesto. En el nuevo milenio hemos eliminado un paso o dos hasta llegar a dejar en manos de la tecnología nuestros caminos sentimentales.

Existen hoy en día ciertas aplicaciones en la telefonía móvil que permiten que en cuestión de minutos estemos frente a frente de un completo extraño, listos para iniciar el atávico juego de la conquista. Es posible, entonces, ir caminando por la calle, chequear quién está cerca y disponible para charlar, tomar un café o salir a bailar (por qué no) y finalmente encontrarse para dicho objetivo en común. Esta aplicación que ya está en los celulares y que causa furor en Estados Unidos es mayormente utilizada por personas de entre 20 y 30 años.

Wang, una estudiante de psicología de 20 años que vive en Queens y aprovecha el nuevo servicio, declaró “Puede llevarte hasta un mes encontrarte con una persona con la que conversás de manera online”. Según ella, los servicios del celular permiten “un rápido salto de un encuentro virtual a un encuentro cara a cara”.

Si bien este tipo de herramientas puede parecer riesgoso, los operadores del servicio alegan que hay un control en cuanto a la cantidad de información que los usuarios divulgan. En los apps, que utilizan la tecnología de localización de los smartphones, los usuarios suben un perfil y luego proyectan su disponibilidad o buscan una lista de usuarios que hayan hecho lo mismo.

Esta novedad es muchas veces parte de servicios de citas ya establecidos, como Blendr, OkCupid Locals y HowAboutWe. Entre los más famosos está Grindr, cuyo target es la comunidad masculina de gays y hasta ahora tiene 2.6 millones de usuarios en el año y medio que ha estado en el mercado.

Tom Critchlow, un newyorkino de 28 años,y frecuente usuario de OkCupid Locals, dijo que la desventaja de este servicio es que “es tan inmediato que puede connotar que las personas sólo quieren juntarse para tener sexo”.