«El arte del buen vivir», por @yelianasalima

Hay personas que dicen que los placeres de la vida son comer y dormir, pero ¿Qué tan cierto es esto?

Obviamente, comer es algo divino, porque primero satisfaces el hambre, luego sacias tus gustos. Personas que están en la onda del “fitness”, no es que dejan de comer no, siguen comiendo en las mismas cantidades, solo que aprenden a comer sanamente, un pollito a la plancha con vegetales y etc. Muchas proteínas y pocos carbohidratos.

Cuando hablamos de dormir, bueno es algo que quisiéramos hacer todos siempre, o por lo menos yo. Es rico sabes, porque descansas el cuerpo y relajas la mente. Al pernoctar te olvidas de todos los problemas o circunstancias que tuviste en el día.

Cuando dormimos reparamos nuestro organismo, recuperamos energías y así podemos seguir con nuestra vida en condiciones óptimas.

Siempre hay posiciones en las que te sientes más cómoda, como por ejemplo, dormir boca abajo, boca arriba o la posición en forma fetal (mi preferida).

No te ha pasado que te duermes pensando en algo y sueñas con eso, es algo que suele suceder muy a menudo. Por lo menos en mi caso casi nunca sueño, o “sueño negro” como dicen muchos por allí. Según estudios eso significa que es cuando tu mente más descansa, porque de verdad no estás pensando en absolutamente nada.

Dormir bien no es solo un placer al que todos podemos acceder, es también la mejor estrategia para evitar malestares y problemas de salud.

Hay otras personas que agregan a los placeres las relaciones sexuales, y bueno si porque no. Es una muy buena forma de relajarte también, ya que liberas endorfinas en el flujo sanguíneo. ¿Sabías que ser una persona sexualmente activa también te ayuda a subir las defensas? Bueno ya lo sabes. Mantener una actividad sexual con frecuencia, provoca más descargas de hormonas que aumentan la producción de anticuerpos que combaten virus y bacterias.

Bueno esos son básicamente “los placeres de la vida”

¿Cuál es tu preferido?

Yeliana Salima / @yelianasalima