El Museo de Arte Contemporáneo recorre la abstracción en Venezuela

Casi simultáneamente a la muestra Enrique Sardá, Obras 1948 2011 que inaugura este domingo 11 de diciembre en la Sala 11 el Museo de Arte Contemporáneo, se dará apertura a la Sala 9 , con la exposición  Abstracción en Venezuela. Un recorrido, cuya curaduría estuvo a cargo de la investigadora María Luz Cárdenas.

El público podrá disfrutar de 32 obras de este paseo plástico. Al respecto referimos el contenido del texto de sala:

“La abstracción se ha consolidado como uno de los lenguajes más influyentes para el desarrollo de las artes en Venezuela y, sin duda, es posible afirmar que la serie de acontecimientos y experiencias que le dan origen, marcan, a su vez, los inicios del arte contemporáneo en el país. Esta exposición propone trazar un recorrido a través de estos procesos y por medio de obras claves que reflejan los problemas planteados por sus principales representantes.

En 1945, dos hechos relevantes abren las compuertas a nuevas formas de creación. Por una parte, se produce la huelga de estudiantes de la Escuela de Artes Plásticas, exigiendo reformas en los programas de enseñanza, en abierta rebelión contra la tradición académica impuesta por el paisajismo y los realismos. De estas acciones surgieron movimientos como la «Barraca de Maripérez» y el «Taller Libre de Arte» con un franco compromiso y la incorporación de los lenguajes del arte moderno. Por otra parte, Alejandro Otero se convierte en el primer artista que viaja a París para vincularse con los movimientos de vanguardia. A Otero le siguió un grupo de jóvenes creadores que, ya en 1950, se organizan como movimiento de ruptura «Los Disidentes», que concentraría la voz más alta en el ingreso radical y firme de los postulados de la abstracción geométrica como idioma predominante en la construcción de la obra de arte.

Los artistas cuyas obras son exhibidas en esta muestra participaron activamente en la fundación y desarrollo de estos movimientos o incorporaron posteriormente sus ideas y búsquedas en la consolidación del arte abstracto en Venezuela. Sus propuestas se organizan en tres áreas de problemas. En primer lugar, aquellos de los que se nutre la abstracción geométrica (composición estructurada en planos de colores y en relaciones articuladas entre las formas y el espacio). En segundo lugar, los problemas vinculados con la consecución del movimiento en la obra, bien sea a través del desplazamiento de las formas, por la movilidad del espectador, o por el efecto de la vibración y la desmaterialización de la composición. En tercer lugar, los problemas concernientes a la búsqueda de una expresión de sentimientos profundos, a través del gesto o de composiciones con fuerza lírica”.