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La compañía de manufactura de relojes Vulcain, cuya sede se encuentra en Le Locle, Suiza, se fundó en 1858; pero fue en 1947 que dio un paso adelante e inventó el primer reloj de pulsera equipado con la función de una alarma. Al parecer fue este detalle el que llamó la atención del entonces presidente de Estados Unidos Harry S. Truman, quien portó este accesorio. Desde entonces, cada mandatario estadounidense han tenido un reloj Vulcain: una tradición que se ha perpetuado hasta el actual presidente de Estados Unidos, Barack Obama. 
Truman llevaba puesto el modelo calibre Cricket de cuerda, equipado con dos barriletes, uno para el mecanismo y otro para la alarma que emite un sonido estridente que recuerda al agudo chirrido de un grillo (de ahí su nombre); pero como lo menciona mx.noticias.yahoo.com, ese peculiar sonido solía encender alertas entre los custodios y de sus guardias de seguridad, quienes al escuchar la alarma pensaban que se trataba de una bomba. Para escuchar el sonido da click aquí.
Se menciona que Harry adoptó la marca tras un relanzamiento en Nueva York de la década del 50. Y trascendió con sus precursores, como indica vulcain-watches.ch, los presidentes estadounidenses Dwight Eisenhower, Richard Nixon y Lyndon Johnson también llevaron un Vulcain en la muñeca.
De hecho se cuenta que la alarma del Cricket de Dwight Eisenhower llamó la atención cuando interrumpió una conferencia de prensa. Pero la marca se ocupó de capitalizar la elección del jefe de Estado con una campaña cuyo eslogan rezaba: Do as Ike does ("Haga como Ike").
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Por su parte, Lyndon Johnson hizo anotar su gusto por esta marca de reloj cuando en un viaje a Ginebra, en una reunión de las Naciones Unidas, mandó a comprar todos los Vulcain disponibles en la ciudad; además se menciona que obsequió más de 200 relojes a allegados y gente importante.
A Lyndon le siguió en la presidencia Richard Nixon, quien pudo cortar con dicha tradición al ser candidato republicano, pero al parecer lo único en común fue precisamente el gusto por portar un reloj Vulcain.
Sin embargo, al parecer los siguientes mandatarios estadounidenses tuvieron otros gustos en cuanto a accesorios de tiempo, pues fue hasta el 2009 que Barack Obama retomó dicha "tradición", al colocarse un modelo Skeleton. La pieza de carátula negra, parte una edición aniversario de sólo 150 unidades, pero que revive el legado con el clásico despertador que sonó hace más de 60 años en la Casa Blanca.
Ha sido de este modo que dicha compañía, de 154 años de vida, ha conseguido un espacio en la historia mundial, además de poseer el accesorio considerado como "el reloj de los presidentes".
En la actualidad Vulcain sigue creando diseños contemporáneos con funciones similares a las de los viejos modelos; y conseguir una de estas máquinas suizas puede costar entre los 6 mil y los 45 mil dólares (entre 77 mil y 580 mil pesos).