Los paparazzis son expertos en dejar mal parados a las celebridades o a la realeza. En días recientes la corona británica se vio envuelta en sendos escándalos. Primero fue el príncipe Harry, quien fue captado totalmente desnudo en Las Vegas mientras se encontraba de vacaciones.
Las fotos dieron mucho de qué hablar, pues el príncipe aparecía con una mujer desnuda. Según testimonios el príncipe y su acompañante estaban jugando billar de prendas, lo que ocasionó que lucieran en traje de Adan y Eva.
Cuando parecía que las cosas se habían calmado, la realeza volvió a recibir otro revés… Ahora, Kate Middletton, esposa de William, fue captada en topless mientras tomaba unas vacaciones a lado del probable futuro rey del Gran Bretaña.
De acuerdo a lo publicado por tiramillas.net, la edición francesa de la revista Closer ha puesto en jaque a la esfera real británica, publicando unas fotografías en topless de Kate Middleton; imágenes que al parecer los medios británicos rechazaron por temor a posibles represalias por parte de la casa real y que podrían ocasionar una demanda judicial por parte de los duques de Cambridge.
Kate y William, que según un comunicado de la casa real están "muy entristecidos" por lo ocurrido, acudieron a Francia para disfrutar de unas vacaciones a principios de mes, donde se dispusieron a tomar el sol en la terraza de su residencia.
En el lugar, la duquesa se desprendió de la parte superior de su bikini; momento que un paparazzi aprovechó para retratarla.
Tras el escándalo, muchas son las voces que relacionan lo ocurrido con la situación de acoso a la que estuvo sometida la princesa Diana, perseguida por los fotógrafos antes de fallecer trágicamente.
Entre esas voces se encuentra la propia casa real, que no ha pasado por alto la similitud en el comunicado que ha emitido al respecto.
"Los duques están muy entristecidos, porque una publicación francesa y un fotógrafo ha invadido su privacidad de forma grotesca e injustificable. El incidente recuerda a los excesos de la prensa y los paparazzi durante la vida de Diana, princesa de Gales, lo cual preocupa al duque y la duquesa. Ambos esperaban gozar de privacidad en aquel lugar. Es impensable que alguien tomara esas fotografías", indicó el comunicado.
La casa real estudia ahora si emprenderá o no acciones legales contra la revista y el fotógrafo, para lo cual han consultado a sus abogados: "El equipo encargado de los duques se encuentran consultando abogados y barajando qué tipo de medidas llevarán a cabo", concluyo el comunicado.