Si alguna noticia no esperaba la presidenta de Argentina seguro que es ésta. El abogado Juan Ricardo Mussa, se querelló contra Cristina Fernández y su hijo Máximo, como presuntos autores de la muerte del ex presidente Néstor Kirchner, fallecido el 27 de octubre del 2010. En la querella, presentada en los Tribunales Federales de Comodoro Pi (Buenos Aires), el abogado acusa a madre e hijo de «homicidio simple».
Mussa, dirigente del Partido Justicialista, considera «encubridores» del supuesto asesinato a Carlos Zannini, secretario Legal y Técnico, al ex chofer de la familia, Rudy Ochoa y a Cristobal López, ex empleado de Kirchner convertido en empresario y actualmente imputado en una causa de contrabando de divisas.
Según Mussa -azote en los juzgados del kirchnerismo- dos testigos reservados aseguran que el ex presidente fue «asesinado de un tiro en la nuca». El disparo -insiste en la querella- se habría producido durante una fuerte discusión del matrimonio, que habría llegado a las manos, y terminado con la vida del marido de la presidenta. Para aclarar todo el episodio Mussa le solicita al juez que ordene la exhumación de los restos de Néstor Kirchner.
Según Mussa, dos testigos aseguran que fue «asesinado de un tiro en la nuca»
El diario «Perfil» -primero en difundir la información- recoge que Mussa solicita asimismo que se cite al personal de Emergencias Médicas de El Calafate, localidad del sur de Argentina en la que se produjo el deceso.
En el parte oficial de defunción, firmado por la Unidad Médico Presidencia, figura que Néstor Kirchner murió el 27 de octubre del 2010 de un infarto fulminante como consecuencia de deficiencias cardiovasculares. El ex presidente tenía una salud delicada y problemas coronarios. El 7 de febrero del mismo año de su muerte tuvo que ser ingresado de urgencia y el 12 de septiembre se le practicó una angioplastia. El paro cardiaco le sobrevino a primera hora de la mañana en su domicilio de Calafate. El velatorio se hizo con el féretro cerrado.
Fuente [Abc.es]