Estas últimas semanas y como consecuencia del atentado que causó la muerte de 10 miembros del semanario Charlie Hebdo las redes se han recargado de términos como musulmán, islamista, árabe o islámico, palabras cuyo significado en realidad es muy diferente. Ya que muchos no están familiarizados con estos términos, es posible confundirse y no tener claro en qué contexto se utiliza cada uno. Aquí vamos a aclarar las cosas:
Islam: es una religión monoteísta cuyo dogma de fe se basa en el Corán. Tiene una premisa fundamental: el único dios es Alá, y Mahoma es su último mensajero.
Islámico: se refiere a todos aquellos países que tienen el islam como religión mayoritaria. También se puede utilizar la palabra para referirse algo relacionado a la religión islámica (cultura islámica, arquitectura islámica).
Islamista: básicamente se refiere a los movimientos islámicos radicales. Hace referencia a los musulmanes integristas. Sin embargo, no se refiere a terroristas. Podría compararse con extrema derecha o extrema izquierda.
Integrista islámico: también conocido como fundamentalismo islámico, es un término que se utiliza para describir diferentes corrientes políticas o político religiosas ligadas al islam, cuya rama más violenta se denomina yihadismo.
Musulmán: según señala la Real Academia Española, así se denomina a una persona que cree en la religión de Mahoma, el Islam. Según señala la web traducinando.com, «el islam tiene ramas, unas más conocidas que otras y cada una tiene sus diferentes creencias y sus opiniones sobre el resto. Esto quiere decir, que los musulmanes pueden ser suníes o chiíes, dos de las ramas principales de la religión musulmana, o de otras», al igual que el cristianismo que cuenta con diferentes ramas como los católicos, los protestantes, entre otros.
Árabe: así se denomina a una persona que nació en un país de habla árabe (actualmente hay 22), claro, independientemente de sus inclinaciones políticas o religión.
Imagen: Wikipedia
Ahora que tenemos un poco más claro estos términos, también se debe tener muy en cuenta que:
– Se puede ser árabe y musulmán.
– Se puede ser árabe y no musulmán.
– Se puede ser musulmán sin ser árabe (como muchos de los habitantes de países como Irán o Pakistán).
– Y se puede vivir en un país árabe o musulmán sin ser ni árabe, ni musulmán.
– Se puede ser árabe, musulmán, formar parte de un partido político islámico y ser un islamista (y aun así no ser un terrorista).
– Se puede ser musulmán, formar parte de un partido político islámico y ser un islamista (y aun así no ser un terrorista).
– Se puede ser integrista sin ser islámico, ni musulmán.
– Se puede ser árabe, musulmán, formar parte de un partido político islámico y no ser islamista.
– Se puede ser árabe e integrista sin ser musulmán.
– Se puede ser integrista sin ser musulmán ni árabe.
¿Estás un poco confundido? Analiza bien todas las combinaciones posibles e infórmate bien antes de usar cualquiera de los términos arriba mencionados.
Fuente [Espacio360.com]