Suscríbete a nuestro canal de Telegram "LeaNoticias" para que estés al día con toda la información sobre Venezuela y España.
La firma japonesa perdió alrededor de 4.400 millones de euros durante el pasado año. Los resultados financieros de Sony para 2011 son los peores de su historia desde que se fundó la compañía hace 66 años. El descenso en la venta de televisores y la dificultad para atrapar parte del mercado de los gadgets se han unido a desastres naturales como el terremoto de Japón.
Sony ha obtenido una pérdidas netas de 4.400 millones de euros en el último año, mientras que las ventas caían un 10%, sumando un total de 62.520 millones de euros. Sólo en el último trimestre, de enero a marzo, la compañía ha perdido 2.700 millones de euros.
Se trata del peor resultado de la historia de Sony, que ya viene arrastrando caídas desde hace tiempo. En esta ocasión hay factores circunstanciales que han agudizado este descenso, pero la evolución ya venía siendo negativa.
Sony, en medio de una reestructuración que recientemente se llevó por delante a 10.000 empleados, ha visto cómo se reducía su cuota de mercado en el sector de los televisores, una de sus divisiones con más tradición e importancia. Diversos rivales, como Samsung o LG, han ido minando la supremacía de la firma japonesa.
El mercado de los videojuegos tampoco está en sus mejores momentospara PlayStation. Además de los competidores fabricantes de consolas, Sony tiene que lidiar con los juegos móviles, disponibles en smartphones y tabletas. El lanzamiento de dos tabletas, así como de la PSVita han sido algunas de las apuestas de la compañía en el mercado de los gadgets.
Suscríbete a nuestro canal de Telegram "LeaNoticias" para que estés al día con toda la información sobre Venezuela y España.
Sin embargo, la posición de Sony también se ha visto afectada de forma importante por los desastres naturales, según recoge la BBC. El terremoto de Japón, en marzo de 2011, tuvo consecuencias fatales para la producción de la compañía y para las ventas. Además, sus fábricas fueron víctima de las inundaciones de Tailandia el pasado año.