Estas son las 10 infieles más famosas de la historia

Por cuestiones sociales y culturales, tenemos la creencia de que los hombres son quienes suelen ser infieles por naturaleza y por lo tanto, el que ellos tengan una «canita al aire» no está tan mal visto si lo comparamos con que una mujer acepte abiertamente el tener una relación extramarital. Lo cierto es que actualmente, la cara de la moneda se ha invertido, pues de acuerdo a bellomagazine.com, son ahora las damas quienes son más propensas a cometer una infidelidad e incluso, suelen encubrirla a la perfección, pues mantienen esa relación bajo cautela. Quizá esta estadística no sea propia del siglo XXI, pues este fenómeno pudo haber estado presente desde hace ya varios años, sólo que se mantuvo en secreto, gracias a la inteligencia femenina. Así lo comprueba quo.es, sitio que publica a varias mujeres relevantes en la historia, quienes sucumbieron a las tentaciones de vivir una infidelidad.1. Madame de Montespan. Françoise Athénaïs de Rochechouart de Mortemart nació el 5 de octubre de 1640 en el castillo de Lussac y fue hija del Duque de Mortemart y de Diana de Grandseigne, personalidades destacadas dentro de la corte de Luis XIII. Françoise estudió en un convento, por lo que su educación fue muy estricta. A los 20 años, fue designada dama de compañía de la reina María Teresa, esposa de Luis XIV. Tres años más tarde se casaría con Louis Henri de Pardaillan de Gondrin, marqués de Montespan, matrimonio condenado al fracaso por la violencia vivida en el núcleo familiar. Dicha situación orilló a Madame de Montespan a serle infiel a su marido, nada más y nada menos con el «Rey Sol», con quien sostuvo una relación de más de 12 años y que culminó con el nacimiento de siete hijos nunca reconocidos. Luis XIV terminó su aventura con Rochechouart de Mortemart para iniciar una relación extramarital con la nana de sus hijos. 2. Madame de Maintenon. Françoise d’Aubigné fue el nombre de pila de esta mujer, quien desde el principio tuvo una vida difícil. Nació en la cárcel, pues meses antes de su alumbramiento, su padre había sido detenido por cometer falsificaciones. Cuando su papá fue puesto en libertad, la familia d’Aubigné se mudó a la isla Guadalupe, en donde su progenitor abandonaría a su mujer y a sus hijos a su suerte. Años después, Françoise regresaría con su madre a Francia, en donde vivirían momentos difíciles, pues no tenían dinero para comer. Françoise vivió con varios familiares, entre ellos, la mamá de su madrina, Madame de Neuillant, quien la llevó a vivir con ella para escogerle un buen marido, el poeta Paul Scarron, quien era 25 años mayor que la joven. Esta relación le sirvió para conocer gente de alta alcurnia, iniciando así una amistad con Madame de Montespan, quien le ofreció convertirse en la institutriz de los hijos que engendró con el rey Luis XIV. Meses después, Françoise desplazaría a Montespan para así convertirse en la nueva amante del monarca francés. En 1683 murió la reina María Teresa, por lo que Françoise tenía el camino libre para convertirse en la nueva soberana gala. Fue así como celebró un matrimonio «de conciencia» con Luis XIV, el cual sostuvo hasta sus últimos días. 3. Madame du Barry. Esta mujer nació bajo el nombre de Jeanne Bécu, fruto de la relación clandestina de una humilde costurera con Jean Vaubernier, monje del convento de Picpus, ubicado en París.

Años después, su madre se casó con Nicolás Rançon, quien la crió como si fuera su hija, dándole educación y un buen techo. Jeanne decidió abandonar los estudios para convertirse en peluquera y posteriormente, se vio envuelta en un lío de faldas, lo cual hizo que su familia le diera la espalda.

Tuvo que trabajar como modelo del modisto Monsieur Labile y en la tienda del mismo, «La Toillette», en donde conoció a Jean-Baptiste du Barry, miembro de la nobleza tolosana, con quien entabló una gran amistad, sin imaginarse que él se dedicaba al negocio de la prostitución.

Jeanne fue instruida en dicho oficio, convirtiéndose en una de las chicas más rentables de du Barry dentro de la corte. Al poco tiempo, se convirtió en la amante oficial del rey Luis XV, pese a la oposición de las hijas de éste, con quien sostuvo una relación hasta el día de la muerte del monarca, quien finalmente, se arrepintió y pidió disculpas por su falta.

4. Madame Pompadour. Su nombre real fue Jeanne-Antoinette Poisson, una joven que nació en un seno de alta alcurnia y que siempre llamó la atención de los caballeros que la rodeaban por su belleza, inteligencia y elegancia.

A los 20 años, su padre la obligó a casarse con su primo Charles-Guillaume Lenormand d’Étiolles, para así poder nombrar a un heredero. Ella no sentía nada por su esposo, a quien realmente utilizó para moverse en los círculos de más alta alcurnia, conviviendo con personajes como Voltaire y Montesquieu.

Esto hizo que Jeanne-Antoinette se propusiera como reto el conquistar el corazón del rey Luis XV, lo cual logró en unos cuantos meses. Estuvo al lado del rey por más de 20 años y jugó un papel muy importante en la política de su país.

5. Isabel II. María Isabel Luisa era hija del Rey de España, Fernando VII, y de María Cristina de Borbón-Dos Sicilias. A los tres años de edad fue nombrada monarca, luego de la repentina muerte de su padre, hecho que desató la conocida Primera Guerra Carlista.

Con tal de solucionar el conflicto, al cumplir 16 años, fue obligada a casarse con su primo Francisco de Asís, duque de Cadiz. El matrimonio era totalmente un fracaso, pues los esposos no se llevaban bien y además, siempre se pusieron en duda las preferencias sexuales de Francisco.

Es por ello que años después, Isabel II confesó haber sido amante de Francisco Serrano Domínguez y Enrique Puig Moltó, de quien se dice fue el padre biológico de su hijo Alfonso XII, quien años más tarde se convirtiera en rey de España.

6. María Antonieta. Fue la hija menor del emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Francisco I, y de su esposa María Teresa I, archiduquesa de Austria, reina de Hungría y reina de Bohemia.

A los 15 años, María Antonieta fue obligada por su madre a contraer nupcias con el nieto de Luis XV de Francia, el Delfín Luis Augusto, quien años más tarde se convertiría en Luis XVI.

La relación entre ellos fue más compleja de lo que se cree. Luis XVI evitaba a toda costa a su mujer, por lo que el matrimonio se consumió varios años después de haberse llevado a cabo. Esto hizo que entablara una relación estrecha con ciertos personajes de la época, tales como el conde de Artois y con el conde sueco Axel de Fersen.

7. María Luisa de Parma. Fue hija de Felipe I, duque de Parma, y de la princesa Luisa Isabel de Francia, hija del rey de Francia, Luis XV. Con 14 años, su familia la obligó a esposarse con su primo carnal, Carlos IV, quien años más tarde se convertiría en príncipe de Asturias.

María Luisa de Parma dio de qué hablar por su carácter impetuoso y por su moral un tanto distraída para la época. Se dice que esta mujer tuvo varios amantes, entre ellos Manuel Godoy, miembro de la Guardia de Corps y quien ejercía una notable influencia en el rey Carlos IV.

María Luisa vivió 24 embarazos, se especula que varios de ellos fuera del matrimonio; de todos, sólo llegaron a buen término 14.

8. Manuela Sáenz. Esta mujer fue la compañera fiel de Simón Bolívar durante la lucha de Independencia de América del Sur. Fue hija ilegítima del hidalgo español Simón Sáenz Vergara, por lo que vivió su infancia encerrada en conventos.

Cuando tenía 19 años, conoció en Quito a James Thorne, un médico acaudalado de origen británico, 26 años mayor que ella. Un año después, contraerían matrimonio. Manuela se interesó por la causa de Simón Bolívar y pronto se unió a las labores independentistas.

En 1822, tuvo la oportunidad de conocer a Bolívar, de quien se enamoró a primera vista. Al poco tiempo se convirtieron en amantes, una relación que duraría hasta la muerte de él, en 1830.

9. Cleopatra. Cleopatra Filopator Nea Thea, mejor conocida como Cleopatra VI, era hija de Cleopatra V Trifena y de Ptolomeo XII Auletes. A los 18 años, heredó el trono de Egipto, junto con su hermano menor, Ptolomeo XIII, con quien se casaría años después, por cuestiones testamentarias.

Cleopatra quería gobernar ella sola, por lo que solicitó ayuda del dictador de la República Romana, Cayo Julio César, para deshacerse de su marido. Tras el destierro de Ptolomeo, Cleopatra y Julio César se hicieron amantes.

10. Agnes Sorel. Hija de un soldado francés, Agnes tenía 20 años cuando conoció al rey Carlos VII de Francia, con quien iniciaría una relación extramarital un par de años después, cuando entró a su corte como servidumbre de la reina María de Anjou.

Sorel es considera como la primera amante real reconocida de manera oficial. Procreó con el rey Carlos tres hijas. A los 28 años de edad, perdió la vida de forma extraña; estaba embarazada. Tiempo después se comprobó que había sido envenenada y se cree que todo fue obra de uno de los hijos de Carlos VII, el rey Luis XI.

[Fuente]