El papa Francisco seguirá el Jueves Santo una tradición que cumplía cuando era arzobispo de Buenos Aires y celebrará la misa de este 28 de marzo en la capilla de una prisión juvenil, según informó el Vaticano.
La basílica de San Pedro o la de San Juan de Letrán era donde, hasta ahora, se celebraba el Jueves Santo en Roma. En esta oportunidad el Papa argentino visitará la localidad “Casal del Marmo”, en las afueras de la ciudad romana.
El Pontífice, durante la misa, lavará y besará los pies a doce jóvenes detenidos.
En su país, el excardenal Jorge Mario Bergoglio conmemoraba el Jueves Santo en una cárcel, un hospital o una residencia de ancianos.