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Los cantantes también tienen días de descanso y Katy Perry decidió que la mejor manera de alejarse de los escenarios era ir a un balneario, en compañía de sus amigos.
Es sabido que a la chica californiana le gusta mucho disfrutar de actividades acuáticas, pues en más de una ocasión se le ha visto en la playa o en diversos clubs luciendo bellos bikinis; sin embargo, en esta ocasión la intérprete de Firework les dejo un "regalo" a sus fans al enseñar de más.
De acuerdo a lo publicado por el sitio Peru21, Katy disfrutaba del sol del verano con sus amigos en el parque acuático Raging Waters de California. Todo marchaba súper bien hasta que Katy decidió meterle adrenalina a las cosas.
La intrépida cantante intentó desafiar a la alberca de olas, aventándose con una tabla de surf. Lo que no tomó en cuenta es que la potencia del agua haría que su bikini le hiciera pasar una mala jugada. Al salir de la alberca, el bikini quedó a media nalga, por lo que la cantante mostró gran parte de su anatomía.
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Los visitantes al parque acuático Raging Waters de San Dimas fueron testigos del "accidente" que sufrió la cantante después de ser atrapada por una ola. No obstante, Katy reaccionó rápido y alcanzó a protegerse con un muro publicitario mientras se acomodaba la parte baja del bikini. Aún así, todo siguió siendo risa y diversión para la cantante, quien no se inmutó por lo sucedido y siguió divirtiéndose como una niña.
Cabe señalar que no es la primera vez que Katy Perry tiene problemas con alguna de sus prendas. En diversas ocasiones, Katy ha enseñado de más; sin embargo, la cantante siempre toma estos percances con muy buen humor.
