¿Tarde otra vez? Más que una excepción, aparecer en el último momento (o muchos minutos después de la cita) ya es tu estilo de vida. A nadie le gusta la impuntualidad, pero es que por más que te lo propongas no logras ser de las primeras en la oficina, la escuela, la reunión o cualquier otro compromiso en tu agenda.
Bien, como no es nada grato que te descuenten el día o encontrarte a tus amigos molestos cuando llegas, te dejo aquí 9 posibles causas de estos retrasos, para que veas que puedes evitarlas todas. ¿Alguna te suena familiar?
Programas mal tu alarma
Lo malo de fiarnos de la tecnología es que por cualquier error nos abandona cuando más la necesitamos. Lo típico es que nos equivoquemos por el formato de 12 horas en lugar de 24 o el modo AM en lugar del PM. Si tu alarma no suena cuando la programas es probable que estés haciendo algo mal.
Te tomas los famosos «5 minutitos»
Sin pena: ¿cuántas de nosotras no aplicamos los 5 minutitos más?, mismos que en un abrir y cerrar de ojos (literal) se convierten en 40 y esto, sin duda, “nos da en la torre».
Dejas pendientes para el siguiente día
Es que hay días en los que simplemente no podemos con nuestra alma, pero para nuestra mala suerte, a la mañana siguiente parece que todo atenta contra nosotras y simplemente es imposible apresurarnos, acomodar el papeleo que dejamos pendiente, planchar la ropa, bañarnos, lavar el refractario con nuestro almuerzo y mil etcéteras más que no pudimos preparar un día antes.
No sabes qué ponerte
Si en más de una ocasión nos quedamos contemplando al armario por varios minutos, o peor, nos probamos una y otra vez la ropa que usaremos, puede que éste sea una de las razones por las que siempre llegamos tarde.
El auto no tiene gasolina
Por falta de dinero, olvido o desidia, subirnos al auto para darnos cuenta que no tenemos gasolina es un muy mal presagio de que llegaremos tarde de nuevo.
Tomas el camión equivocado
¿Y qué pasa cuando nos subimos al bus equivocado? Tal y como hoy me sucedió la otra vez, que en mi intento por ahorrar tiempo quedé cuatro cuadras más lejos de mi destino ¡Uff!
Lo bueno es que hice algo de ejercicio matutino, lo malo es que volví a llegar tarde.
Te salió una espinilla
¡Genial, hoy es un día lindo! Nos despertamos temprano y vamos con buen tiempo cuando de pronto, a punto de colocarnos la base de maquillaje aparece una gran y horripilante espinilla.
¿Podemos ignorarla? ¡Claro que no! Y en la lucha por eliminarla o esconderla nos hemos llevado otros 20 minutos en arreglarnos.
Abres el Facebook
¡Sensual y adictivo Facebook! De esas veces que juras solo revisar tu perfil y te quedas chateando por al menos 15 minutos (en el mejor de los casos). Esto me ha pasado últimamente y comienzo a creer también es un problema.
Se te ocurre una idea que no puedes dejar pasar
Bueno, es que la inspiración puede llegar en cualquier momento y como redactora no puedo dejarlo pasar, lo malo es que a veces no es solo una línea sino el artículo completo y cuando menos lo pienso ¡ya es tardísimo!
Fuente [Imujer.com]