Los errores más comunes que cometen los divorciados

Enfrentar una separación suele ser una etapa difícil, donde diferentes emociones como la tristeza, el enojo y la frustración están presentes.

Y es que tomar la decisión de abandonar una relación o que te lo pidan nunca es fácil, reseña en su página web de10.com.mx

Sin embargo, podemos disminuir la confusión de sentimientos si evitamos algunas actitudes que sólo podrían terminar dañándonos más.

Para que te asegures de que cada pisada tuya es en terreno fijo, te presentamos un listado de infobae.com, con los errores más comunes que cometen las personas divorciadas para que ¡no lo hagas!

Revelar intimidades. Es común que cuando una pareja se separa, busca apoyo en su entorno y casi siempre termina revelando asuntos privados para justificar lo que ocurrió. Esto puede generar que se rompa cualquier posibilidad de un buen vínculo con la ex pareja en un futuro. Además, la intimidad también era tuya. Esto genera una visión condicionada sobre los hechos, así que mejor evítalo. Por cierto, evita hablar también de los hijos, pues tu papel como padre o madre no se rompió, sólo es la relación con la pareja y los motivos no son necesarios de explicar.

Sexo con la ex pareja. Es común que siga habiendo reencuentros sexuales, pero hay que ser conscientes que esto nos puede llevar a un gran confusión, sobre todo cuando uno de los dos aún tiene la esperanza de volver a estar juntos, lo que significaría más problemas.

Divorciarse de… ¡los hijos! Hay que comprender que siempre habrá un vínculo con la expareja porque tienen hijos, así que lo mejor será tomar las cosas con sabiduría y jamás utilizar a los niños para hablar mal del otro o para chantajes. La familia no murió, sólo se adapta a nuevas condiciones, grábatelo.

Iniciar enseguida otra relación amorosa. Antes de comenzar una nueva aventura, hay que dar un tiempo para el duelo, es decir, un tiempo para metabolizar lo sucedido. De esta manera evitas cometer los mismos errores que llevaron a esta relación a terminar.

Presentar parejas no estables a los hijos. Tus hijos terminarán confundidos si les presentas una y otra vez a un sinfín de hombres o mujeres, según sea el caso. Hay que esperar a tener estabilidad con la pareja nueva para introducirla a la familia.