Las causas de la halitosis como problema severo son múltiples, desde falta de higiene, problemas dentales o digestivos o diabetes. También hay otros casos menos dramáticos como cuando el mal olor se produce por comer comidas aliñadas con productos como ajo o cebolla, o por la ingesta de alcohol y fumar. Acá te entregamos un pool de opciones para controlar y eliminar fácilmente esta desagradable molestia.
Los factores que causan el mal aliento son diversos. Entre ellos se cuentan: problemas gástricos, falta de higiene bucal, enfermedades de las encías, dieta inapropiada, estreñimiento, diabetes, indigestión, mal funcionamiento hepático, goteo postnasal, estrés, cigarrillo, ingesta de alcohol o comidas de aromas fuertes, como aquellas aliñadas con ajo, cebolla o especies.
Es importante señalar que la placa bacteriana juega un papel importante en la halitosis, la cual es una película pegajosa y suave de bacterias (que pueden llegar hasta 50 billones) que se fija a los dientes y encías. Éstas se alojan, especialmente, en los lugares más oscuros de la boca causando mal olor. De allí la importancia del cepillado y la buena higiene bucal.
Acá te entreganos sencillos consejos caseros para controlar o erradicar el problema. Toma nota.
1.- Utiliza una pasta de dientes con clorofila.
2.- Los caramelos de menta son muy eficiente para eliminar el mal aliento, por lo que siempre procura tener un paqueteen tu cartera.
3.- Come en ayunas un durazno en ayunas. Idealmente fresco, por lo que prefiere a los congelados que los de conserva.
4.- Si la halitosis es causada por las encías inflamadas o que sangran, debes hacer un enjuague bucal compuesto por dos cucharadas de salvia roja en medio litro de agua. Esta preparación debe llevarse al punto de ebullición y seguidamente déjela reposar durante 20 minutos.
5.- Otro remedio casero consiste en el uso del perejil. Para ello, se hierven dos tazas de agua y varias ramitas de perejil conjuntamente con dos o tres clavos de olor enteros. Esta mezcla debe ser revuelta mientras se enfría. Después debe ser filtrada y ser utilizada como un enjuague varias veces al día.
6.- Usa un enjuague bucal hecho con una cucharada de bicarbonato de soda en ¼ taza de agua (60 ml).
7.- Mastica después de una comida un clavo de olor, anís o canela en rama.
8.- Licúa 250 grs de zanahoria, 125 grs de espinacas y 125 grs de pepino. Toma medio vaso después de las comidas.
9.- Elabora un jugo con un durazno, medio pmelo, un cuarto de mango, dos ramas de yerbabuena y media taza de agua. Primero extrae el jugo del pomelo y luego licúa todos los ingredientes con el jugo de éste y el agua. Toma a diario al mediodía tres veces a la semana por un mes.
10.- Prepara un té con una cucharada de yerbabuena en una taza de agua. Deja hervir durante 10 minutos y tómalo después de cada comida.
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