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El cantante británico, que fue padre primerizo a principios de este mes cuando su esposa Ayda dio a luz a su hija Theodora ‘Teddy’ Rose, está preocupado por cómo se las ingeniará para compaginar su vida personal y su vida profesional.
"Nunca he sido estrella del pop y padre [al mismo tiempo]. Así que no tengo ni idea de cómo manejarme con esto. Estoy aterrado. No quiero ser un mal padre. Es decir: nunca he cuidado de mí mismo. Y ahora tengo que cuidar de otra persona", declaró a la edición alemana de la revista In Magazine.
A pesar de sus temores, Robbie no quiere abandonar su carrera musical ni a sus fans.
"Si lo has experimentado una sola vez, quieres que se repita una y otra vez. Incluso aunque a veces sea agotador. Pero lo echo de menos. Quiero recuperarlo," afirmó.
El componente de Take That reconoce que está intentando cambiar algunas costumbres.
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"Ahora siempre intento ser puntual. Y a veces me paso de puntual. Tan solo porque es lo correcto", declaró Robbie.
Tal vez la presencia de su esposa explique esa mejora de su puntualidad.
"Últimamente, mi esposa siempre me acompaña al trabajo. Solo porque ella me influye de forma positiva", confesó la estrella.