¿Vacaciones en Benidorm? Sugerencias para sacarle el máximo provecho

Aunque tengas poco tiempo viviendo en España es probable que hayas oído hablar de Benidorm, el famoso balneario en la costa este de España, ubicado en plena Costa Blanca de la Comunidad Valenciana.

Esta pequeña pero hermosa ciudad «playera» atrae por igual a jubilados que acuden ansiosos en busca de sol (y casinos); como a turistas ingleses que encuentran en sus calles decenas de comercios donde son atendidos en su idioma.

Sin embargo, el turismo en Benidorm tiene opciones que abrazan a personas de cualquier origen y edad. En sus calles con WiFi gratuito la gente consume por igual helados y cervezas, y las tiendas de recuerdos se mueven con el mismo apogeo que en los años 70’s.

Si quiere conocer este seductor rincón de la geografía española, famoso por su vida nocturna, lo primero que debe hacer es reservar su hospedaje con tiempo. Hoteles baratos en Benidorm hay muchísimos, casi tantos como palmeras, bares y rascacielos; pero la ocupación suele ser alta y, dependiendo de lo que estés buscando, la ubicación, antigüedad y servicios incluidos puede hacer la diferencia entre unos y otros.

En los alrededores de la avenida de Europa y a medida que se acerque a la Playa del Levante, a través de la avenida del Mediterráneo, encontrarás infinidad de restaurantes y pequeños establecimientos en los que tomar una copa.

Al norte de la ciudad, en el Rincón de Loix (el barrio que concentra la mayor cantidad de edificios de gran altura) el turismo se multiplica durante el verano por lo que, si estás buscando tranquilidad y sosiego, quizás sea preferible mirar otras zonas de la urbe.

Pero como tiene sus pros y contras, te contamos que en la esquina del Rincón de Loix en la playa de Levante hay una estación de Cable Ski donde se hacen campeonatos de saltos y wakeboard. También puedes disfrutar del parasailing o paracaídas acuático y bananas acuáticas.

Ahora bien, en Benidorm hay hoteles para todos los gustos, pero para sacarle mayor provecho a su estadía tenga en cuenta las siguientes recomendaciones:

Reserva tu hotel con al menos un mes de anticipación. Recuerda que, si tu ventana tiene vista al mar, la habitación suele salir mas costosa. Si el hospedaje incluye desayuno buffet, mejor (la variedad de comidas y, sobre todo, la comodidad que representa este servicio se agradece después del segundo o tercer día de playa y sol)

Si vas en verano lleva ropa ligera y evita el exceso de equipaje que solo hará más incómodo tu trayecto. Eso sí, recuerda que, al ser una zona costera, las noches son más frescas y no está demás tener a mano una rebeca​ o cárdigan.

Lleva zapatos cómodos. En Benidorm se camina mucho y recorrerla a pie es un paseo que merece mucho la pena. Además, el buen clima siempre ayuda y tener la certeza de que regresarás a un hotel cómodo y confortable, es un alivio.

No comas en el primer restaurant que veas. Las opciones para comer y beber en Benidorm son infinitas, pero en algunos casos pueden resultar demasiado costosas para lo que realmente ofrecen. En la mayoría de los establecimientos es posible mirar la carta antes de entrar y siempre puedes preguntar los precios antes de ordenar.

No dejes de visitar el Mirador del Castillo de Benidorm, desde donde se pueden admirar los atardeceres con vistas a las dos playas.

Recorre los alrededores de Benidorm y te sorprenderá la belleza de sus pueblos más cercanos como Villajoyosa (donde está la fábrica de Chocolates Valor y puedes disfrutar de una visita guiada gratuita), Altea, Calpe o Guadalest.