Cinco preguntas que no te atreves a hacerle a tu ginecólogo

Antes de empezar con este listado hay que decir algo muy importante: que NUNCA te de pena hacerle una pregunta a un doctor.

No importa cuál sea tu duda o inquietud, lo más probable es que tu pregunta tenga una sencilla explicación, pero puede suceder que gracias a ti tu doctor se dé cuenta de algo que estaba omitiendo (y nunca creerán que eres una tonta por preguntar).

El Huffington Post investigó entre algunos ginecólogos para descubrir qué es lo que a sus pacientes les da pena preguntar (pero que muchas lo hacen).

1. Tengo muy poco sexo, ¿está bien?

De acuerdo con la doctora Susan Blum esta es una pregunta muy recurrente, y muchas mujeres se sienten mejor cuando descubren que un alto porcentaje de parejas tienen relaciones sólo una vez al mes o menos.

Esto es más notorio cuando ambas personas trabajan o poco tiempo después de dar a luz, pero es completamente normal. Tanto la doctora como nosotros en ActitudFEM damos sugerencias para elevar este número, pero la realidad es que muchos matrimonios no han podido hacerse el tiempo de tener sexo más seguido. Si sientes que lo haces poco, es normal. Si quieres hacerlo más checa esto.

2. El olor

Personalmente odio que se compare el olor de la vagina de algunas mujeres con el olor a pescado, simplemente porque se ha convertido en una broma recurrente, cuando es indicador de un problema médico. Pero muchas mujeres preguntan a su ginecólogo si es normal que su vagina huela a “pescado”, y la respuesta es que no debe de ser, pero es un problema fácil de resolver.

Este olor comúnmente es síntoma del tipo de infección vaginal más común y puede ser tratado con antibiótico. Nunca está de más ir con tu doctor cuando veas algo diferente, y no sientas vergüenza por las señales de alarma que te da tu cuerpo.

3. ¿Debería hacerme un examen de ETS?

Sí, la respuesta siempre es sí. Si por alguna razón estás pensando que deberías hacerte un examen para revisar que no tengas enfermedades de transmisión sexual, ¡hazlo! Incluso si estás en una relación monógama desde hace muchos años, si no te estás cuidando con condón recuerda que no sólo estás durmiendo con tu pareja sino con todas las mujeres con las que él estuvo antes de ti. Muchas enfermedades, como la clamidia, no siempre desarrollan síntomas, así es que aún si llevas varios meses con él puede ser que estés infectada. Duerme tranquila, trata problemas, evita contagios, hazte un examen.

4. Herpes

Si lo tienes sabes que no se quita, pero no es el fin del mundo. Hay dos tipos de herpes, el oral que te provoca los fuegos y el genital que aparece alrededor del ano y la vagina. Decirle a tu pareja puede ser difícil (aunque es lo responsable, bajo ninguna circunstancia deberías ocultar una enfermedad de este tipo) pero tu doctor te puede ayudar a evitar contagios. Hay medicina que puedes tomar y métodos que debes seguir. ¡Que no te de pena preguntar!

5. ¿Posiciones para concebir?

Muchas mujeres que están tratando de quedar embarazadas preguntan si hay alguna posición que ayude a la concepción. Aunque sientas que si elevas la pelvis es más probable que el espermatozoide llegue a donde debe de ir la verdad es que no hay estudios que indiquen que alguna posición es mejor que otra. Sin embargo, pregúntale a tu doctor qué puedes hacer para elevar tus posibilidades de quedar embarazada.

[Fuente: actitudfem.com]