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En los últimos tiempos asistimos a un auge considerable del juego online, tanto en el sector de los casinos como en el de las apuestas Esto se debe a la nueva implantación tecnológica, que permite a cualquier usuario disfrutar de esta nueva opción de juego en la red incluso desde su móvil, o desde cualquier otro dispositivo conectado. Asi lo destaca noticierodigital.com
Esto ha supuesto el desarrollo integral de esta actividad, cuyo eslabonamiento dentro de la economía va mucho más lejos de lo que podemos pensar. Tanto como para que las apuestas deportivas se hayan convertido hoy día en un potente sector empresarial. Para tenerlo claro analizaremos las cifras y las implicaciones de este nuevo sector económico.
El desarrollo del sector
Antes de empezar es clave conocer en qué punto se encuentra el desarrollo del sector de la industria de las apuestas. Hablamos de un sector en desarrollo y que en muchos países o bien está prohibido o bien opera en una situación de ilegalidad, lo que ocurre en la mayoría de los casos. En consecuencia, no todos los operadores tienen las mismas oportunidades de desplegarse en cada país, lo que influye en las cifras e implicaciones que veremos más adelante.
La buena noticia es que cada vez son más los gobiernos que están tomando medidas al respecto, con una legislación específica para el sector. Esta facilita el despliegue de esas casas de apuestas online, lo que da más garantías a los jugadores y a los operadores. Pero, además, estas normas también imponen cargas fiscales a ambos participantes del juego, lo que se traduce en una mejora de los ingresos por impuestos de la actividad vinculada al juego, que no se perciben sin dicha legislación.
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Las cifra
Considerando todo lo expuesto, si hacemos una foto fija de las empresas dedicadas a las apuestas deportivas a nivel mundial, observamos como la cifra de negocio durante 2021 era de unos 200.000 millones de dólares. Esta incluye los resultados de las empresas que operan con licencia y las estimaciones de los gobiernos en los que el juego aún no es legal.
Respecto del personal, se estima que las apuestas deportivas generan en torno a 100.000 puestos de trabajo, tanto directos como indirectos. Pensemos que estas empresas emplean numerosos perfiles de alta exigencia, vinculados a operaciones y redes, junto a perfiles comerciales, asistencia al cliente, financieros y de seguridad, entre otros.
Finalmente, aunque no hay cifras precisas, es obvio que hay una fuerte aportación fiscal por parte de las empresas. Parte de la cifra procede de los impuestos pagados por los operadores y también por los jugadores de sus ganancias, que generalmente tributan por el impuesto sobre la renta en el país donde residen.
Las aportaciones indirectas
Adicionalmente a todo lo mencionado, los operadores de apuestas deportivas también tienen implicaciones indirectas en la sociedad. Como ejemplo, es habitual que muchos operadores estén vinculados a clubes deportivos que, gracias a estos patrocinios, disponen de más dinero para sus fichajes, para sus instalaciones y para cualquier otro cometido. Estos son algunos equipos que disfrutan de tales patrocinios:
Southampton (Premier League)
West Ham United (Premier League)
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Golden State Warriors (NBA)
Chicago Bulls (NBA)
Paris Sant Germain (League 1)
Botafogo (Campeonato Brasileño A)
Otro aspecto interesante es que estas apuestas también influyen en otros sectores como el de la tecnología o el marketing y la publicidad. Dado todo lo que mueven las casas de apuestas, es obvio que los desarrolladores deben esforzarse para dar lo mejor posible y cubrir las necesidades del sector. Todo ello sin olvidar el negocio que aportan a las empresas financieras usadas para los pagos y depósitos de los jugadores. Así que, como vemos, el sector mueve la economía mucho más allá de su propia actividad apostadora.
