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Venezuela tiene muchos rinconcitos de insospechada belleza que merecen un recorrido, aunque sea de entrada y salida, los cuales nos dejan un recuerdo muy agradable. Poco conocidos porque a la hora de hacer turismo la mayoría prefiere los lugares más nombrados, sin sospechar que algunos pueblos tienen tantos encantos que si no nos lo cuentan no lo podemos saber.
Uno de estos pueblos es Magdaleno, localizado en el estado Aragua. Para dirigirnos allá salimos de la Autopista Regional del Centro por el distribuidor Palo Negro y se toma la vía a la derecha que va hacia Guigue, aproximadamente 8 kilómetros más allá está el arco de entrada al pueblo. Por aquí se bordea la parte trasera del Lago de Valencia, razón por la cual se observan muchos cultivos y algunas haras.
La principal actividad económica de Magdaleno son los muebles de madera que son expuestos en la calle, como si de una feria se tratase, los cuales se pueden adquirir a precios sumamente atrapadores. Camas, mesas, sillas, comedores, juegos de recibo, gaveteros en varios tipos de madera que pasan por el pino y el samán.
Se pueden comprar tal cual como están o usted puede diseñarlos y encargarlos, según sean sus necesidades. También se los pueden enviar si, no tiene sus propios medios para transportarlo.
Al salir de este encantador pueblo, por una estrecha carretera se llega a San Francisco de Asís, un pueblito muy acogedor con su Plaza Bolívar muy bien cuidada, árboles frondosos que cobijan con sus sombras a los habitantes del lugar quienes allí se dan cita para encontrarse y contarse sus cuitas.
Continuando la vía llegamos a Villa de Cura. Aquí por el contrario la Plaza Bolívar está un tanto descuidada pero el pueblo luce grande y desarrollado. Esta ciudad sobresale por la talabartería que se puede conseguir en distintos negocios.
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Algo verdaderamente impresionante y refrescante es observar la laguna de Taiguaiguay, embalse que con sus 8 mil hectáreas nos ofrece un bello paisaje cuando seguimos nuestro viaje para llegar a Cagua. Si el paseo es al atardecer la vista de la laguna al ponerse el astro rey es mucho más preciosa, ella ha sido inspiración de pintores, poetas y autores.
A pesar de ser una de las ciudades dormitorios del centro del país, Cagua se vislumbra como una ciudad industrial por la gran cantidad de empresas que tienen sus sedes en el lugar. La mayoría de las compañías del ramo automotriz están allí.
Antes de volver a tomar la autopista, si queremos continuar el paseo por las carreteras internas podemos conocer San Mateo, La Victoria y El Consejo, localidades que también tienen sus magias.
Conoce Venezuela, el país más bello del mundo
Gliceria Gil / @glimargica