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Una difundida creencia popular dice que quien deja de fumar tiende a engordar. No se trata de un mito urbano, sino de una realidad que se repite, pues quien logra abandonar el mal hábito del tabaco siente la necesidad de satisfacer una angustia oral, una ansiedad, llenando su boca de alimentos. Y claro, la primera opción no es precisamente una hoja de lechuga, sino comidas rápidas, golosinas y bocadillos. ¿Qué alimentos se pueden consumir para dejar de fumar sin perder la figura?.
Llevar un cigarrillo a la boca crea un hábito, una conducta que, al ser eliminada o minimizada de la vida diaria, nos impone una falsa necesidad de reemplazo. Así terminamos comiendo golosinas, masticando y chupando bocadillos para evitar el impulso de encender otro cigarrillo. Pero lo primero a tener en cuenta es que debes intentar controlar esta ansiedad.
«Los lácteos tienden a recubrir las papilas gustativas, lo que afecta el sabor de los cigarrillos.»
Qué comer cuando dejas de fumar?
Para eliminar la ansiedad y cuidar la figura, puedes consumir los alimentos que veremos a continuación. También te serán beneficiales si estás en el camino a dejar de fumar o de minimizar el consumo.
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En primer lugar, ten en cuenta los lácteos, que tienden a recubrir las papilas gustativas, lo que afecta el sabor de los cigarrillos. También contienen altos aportes de vitamina B, que es vital para la eliminación de los depósitos de nicotina en el organismo. Te recomendamos consumir yogures, quesos bajos en calorías y un vaso de leche cuando sientas la necesidad de fumar.
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«Beber un vaso de zumo de frutas no sólo te alimenta y calma tu sed, sino que te desanima a encender el siguiente cigarro.»
Entre los vegetales hay estrellas más brillantes, como es el caso de la zanahoria. Además de poseer vitamina B, es una alta fuente de vitaminas A y C, y su textura firme hace que estemos más tiempo masticando y la digestión sea más lenta, lo que ayuda a eliminar la ansiedad.
Las frutas son otro gran aliado para eliminar el tabaco y restringir su consumo, pues son otras altísimas fuentes de vitaminas. En especial los cítricos, fuente enorme de vitaminas C que mantienen hidratado al organismo. También su sabor residual altera el sabor del tabaco, es decir, beber un vaso de zumo de frutas no sólo te alimenta y calma tu sed, sino que te desanima a encender el siguiente cigarro. El kiwi puede ser aprovechado aquí, pues además de tener estos beneficios es un poderoso antioxidante.
Finalmente, las legumbres con su prolongada masticación y lenta digestión son buenos recursos para alimentarnos y no retomar el hábito del tabaco. Entre ellas, los porotos blancos afectan el sabor del tabaco en la boca, y también favorecen al tránsito intestinal, ayudando a eliminar toxinas de manera efectiva.
Si estás dejando de fumar, prueba consumir regularmente estos alimentos para facilitar el buen camino que estás emprendiendo.