El calabozo de la libertad: «Carta a Tibisay Lucena» por @GustavoAzocarA

Estimada Tibisay:

Te escribo estas líneas a las 6 de la mañana del sábado 6 de octubre
de 2012, es decir, 24 horas antes de que se inicie la votación de las
elecciones presidenciales más importantes en la historia de Venezuela.
Imagino que a esta hora debes estar molida del cansancio. He visto tus
últimas apariciones públicas a través de la televisión y no he podido
evitar sentir un dejo de compasión hacia ti. Tanto trabajo y tanta
presión juntas deben tenerte los nervios de punta.
Estimada Tibisay: a decir verdad tú no eres santo de mi devoción.
Aprendí a desconfiar de ti desde el mes de junio de 2010, cuando sin
ton ni son, ordenaste que me aplicaran una cosa que ustedes llaman el
código 8, e insertaste en mi página de datos en el CNE una coletilla
que decía que yo estaba “inhabilitado por la Contraloría General de la
República” cuando en realidad nunca fui inhabilitado por nadie, ni por
la Contraloría ni por ningún tribunal de la República.
Luego me enteré que todo había sido una treta tuya, montada para
complacer a la señora Varela, quien exigió a las cuatro rectoras del
CNE que impidieran a como diera lugar mi inscripción como candidato a
la Asamblea Nacional por el circuito San Cristóbal. La “inhabilitación
express” que me aplicó el CNE que tú presides, duró sólo 7 días, justo
el tiempo de las postulaciones. Después desapareció como por arte de
magia.
Estimada Tibisay: estas líneas son para pedirte, en nombre de todos
los venezolanos, que este 7 de octubre de 2012 actúes de acuerdo con
tu conciencia. Todos sabemos que desde el Palacio de Miraflores,
aumentarán las presiones sobre ti y sobre cada una de las rectoras pro
oficialistas del CNE para que traten de impedir el fin de eso que
llaman pomposamente “el proceso revolucionario”.
Desde el gobierno nacional tratarán de obligarte a hacer cosas
indebidas, tal como lo hicieron con el simulacro, cuando pretendieron
que el CNE diera a conocer unos resultados a pesar de que no hubo
totalización, ni testigos, ni actas firmadas o selladas, ni nada por
el estilo. Por cierto: me enteré que fuiste tú, junto con el rector
Vicente Díaz, quienes convencieron a las otras 3 rectoras del
gravísimo error que habría significado publicar esos resultados y del
daño que una decisión como esa habría causado en la ya menguada
credibilidad del máximo organismo comicial del país.
Estimada Tibisay: las otras tres rectoras del CNE, que sólo parecieran
pensar en sus intereses personales, y que tienen fama de ser
prominentes militantes del Psuv, intentarán ejercer mucha presión
sobre ti, para que incurras en el error de parcializarte hacia el
candidato del gobierno. Estas horas que están por transcurrir van a
ser duras, muy duras, y van a requerir de mucho temple, de mucha
convicción, pero sobre todo, de mucho sentido de la historia.
En el año 1998, un Consejo Supremo Electoral dominado totalmente por
la cuarta república, proclamó ganador a un ex militar golpista.
Imagino que sobre aquellas autoridades del extinto CSE hubo todo tipo
de presiones, sobre todo de quienes no querían dejar el poder, y de
quienes ya sabían lo que se avecinaba para Venezuela con un gobierno
presidido por el antiguo administrador de una cantina.
Pero a pesar de ello, aquellas autoridades del CSE respetaron la
decisión de la mayoría de los venezolanos y proclamaron ganador al
candidato que había triunfado en las urnas.
Estimada Tibisay: es casi seguro que a ti te va a corresponder tomar
una decisión como la que tomaron en 1998 aquellas autoridades del
antiguo Consejo Supremo Electoral. Es altamente probable que el
vencedor en los comicios de este domingo sea el candidato que no es de
tu agrado.  Pero aquí no se trata de que gane el candidato al que uno
está apoyando, sino de que gane el candidato que más votos saque en
las urnas.
Tu responsabilidad, estimada Tibisay, radica en hacer que se respeten
esos resultados y en impedir, a cómo de lugar, que alguien o algo
pueda violentar la sagrada voluntad de la gran mayoría de los
venezolanos.
Estimada Tibisay: tu nombre pasará a la historia a partir de este
domingo 7 de octubre. Pero eres tu quien decide cómo quiere pasar a la
historia. Puedes hacer que los venezolanos te recuerden como la
Presidenta del CNE que soportó todo tipo de presiones y chantajes,
pero que no sucumbió e hizo respetar los resultados y la decisión de
la gran mayoría de los venezolanos que votaron ese día.
Pero también puedes pasar a la historia como la Presidenta del CNE que
se prestó para que un gobierno desgastado y sin apoyo popular se
eternizara en el poder manipulando los mecanismos democráticos
consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela.
La decisión de cómo quiere que la recuerde la historia es tuya,
estimada Tibisay. Ojalá y no me defraudes por segunda vez. Que Dios te
bendiga. Y que Dios Bendiga a Venezuela.

Por Gustavo A. Alcalá