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La victoria (una de ellas) de Apple contra Samsung se ha visto disminuida por la decisión de una jueza de reducir casi a la mitad la abultada cantidad inicial.
La juez de distrito Lucy Koh ha invalidado parte (casi la mitad) de la condena en el que enfrentaba a Apple con Samsung por la que la marca coreana se veía obligada a pagar algo más de 1.000 millones de dólares, reduciéndolo en 450 millones de dólares con lo que la cantidad a percibir por los de Cupertino finalmente se queda en “sólo” 600 millones.
El juicio tiene que ver con la infracción de patentes y esta decisión judicial impide a Apple solicitar un ulterior aumento de la cuantía a percibir. También establece la sentencia que Samsung tiene derecho a un nuevo juicio relativo a las cuestiones que tenían que ver con sus terminales Galaxy y que eran los responsables de esa parte de la anterior sentencia ahora anulada, la de los 450 millones de dólares, pero por otra parte también considera que se debe tener en cuenta los posibles daños que podrían reclamarse por las ventas de los dispositivos que infringían las patentes, con lo que aún no vamos a poder dar por terminada esta inacabable batalla.