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Perece que las jóvenes estrellas de la música se hunden una tras otra en lo que es ya un festival de decadencia adolescente. Esta vez le ha tocado el turno a un habitual de la polémica, el cantante Justin Bieber, cuyos problemas con las drogas podrían forzar su entrada en un programa de rehabilitación.
Estos chicos no se cansan de batir récords y no solo hablamos de ventas de discos o entradas a conciertos y es que cuando la mayoría de los famosos llegan al límite de la rehabilitación no suelen contar con unos escasos 20 años.
La última broma de Justin Bieber que consistió en tirar huevos a la casa de su vecino, le valió el registro policial de su casa en la cual se encontraron las drogas que el cantante guardaba. Bieber alegó no ser el dueño de las sustancias, lo que conllevó el arresto de su amigo Lil Za por posesión de drogas. Sin embargo la palabra del cantante no es suficiente para su entorno familiar que observa con preocupación el ciclo de decadencia que atraviesa la joven estrella.
Por lo visto Justin Bieber sería adicto a un cocktail llamado sizzurp, una bebida cuyo principal ingrediente es la codeína y que produce efectos alucinógenos. Esto unido a que el cantante consume bajo receta Xanax, un medicamente que se prescribe a personas que sufren ansiedad o ataques de pánico y que actúa disminuyendo la excitación cerebral, crea una peligrosa combinación que pondría en peligro la salud del cantante.
Justin Bieber habría consumido esta mezcla en los diferentes encontronazos que ha tenido con la ley como su affaire con una prostituta en Brasil o los escándalos en Argentina o Australia. Todo este ciclo ha llevado a su familia y amigos a intentar que Bieber entre en razón y opte por comenzar una terapia de desintoxicación ahora que todavía está a tiempo. Incluso Selena Gómez, que recientemente ha reiniciado su relación con el canadiense, ha amenazado con dejarle si la dinámica continúa y ha declarado públicamente que no le gustan las compañías de su novio. De hecho esta actitud autodestructiva fue la causante de la ruptura de la pareja ya que bajo los efectos del alcohol y las drogas el cantante fue infiel en repetidas ocasiones.
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Sin embargo no parece que Justin Bieber esté dispuesto a dejar su salvaje estilo de vida y todo apunta a que pasará por encima de las recomendaciones de familiares y amigos. El cantante declaró hace unos meses: «Si alguien cree que lo que necesito es rehabilitación esa es su propia estupidez. Tengo 19 años, con 5 álbumes y he visto el mundo entero».
Esta actitud tan soberbia no lo ayuda en absoluto, pero tanto las fans como su entorno más cercano esperan que finalmente Justin Bieber entre en razón y pida ayuda. A pesar de su falta de respeto el canadiense ha tenido una carrera meteórica que podría echarse a perder por su descontrol. Sin duda todos echamos de menos a ese niño bueno que aunque abarcaba menos titulares era más famosos por su música que por los escándalos.
[Fuente: laverdad.es]