El conocimiento general dicta que las bebidas alcohólicas sólo producen daños en el organismo. Sin embargo, hay ciertas bebidas que tienen numerosos beneficios para nuestra salud, como sucede con la cerveza.
La cerveza eleva el nivel de lipoproteínas de alta densidad en la sangre, que es el nombre elegante que recibe lo que conocemos como "colesterol bueno". Este tipo de colesterol ayuda a limpiar nuestro líquido vital, mejorando y facilitando así las funciones cardíacas del cuerpo. El consumo recomendado para un corazón sano y fuerte, y para prevenir así enfermedades coronarias, es de hasta un vaso de cerveza al día, con o sin alcohol.
"Un consumo de hasta 3,5 litros de cerveza a la semana, en adultos mayores, ayuda a prevenir el desarrollo de demencia senil."
La cerveza ayuda a fortalecer los vasos sanguíneos, recubriéndolos y evitando la ruptura de trombos y la obstrucción de arterias, ayudando a prevenir enfermedades y males derivados de ambas condiciones, como la trombosis.
Beneficios de la cerveza para el cerebro y huesos
Se ha demostrado que un consumo de hasta 3,5 litros de cerveza a la semana, en adultos mayores, ayuda a prevenir el desarrollo de demencia senil. Por otro lado, algunos estudios sugieren que el consumo de uno a dos vasos de cerveza por día podría estar relacionado con una actividad cognitiva superior, en especial en las mujeres.
El consumo de cerveza ayuda a combatir la pérdida de la masa ósea en hombres y mujeres de cualquier edad. Esto, a su vez, ayuda a fortalecer los huesos, previniendo el desarrollo de enfermedades como la osteoporosis y otras similares.
Otros beneficios
Las personas con diabetes también pueden beneficiarse del consumo de cerveza, ya que ayuda a prevenir enfermedades coronarias y cardíacas, como el desarrollo de la diabetes tipo 2.
Otro aporte de la cerveza es para la relajación del cuerpo. Es algo simple: es una bebida deliciosa, normalmente compartida entre amigos o en un momento agradable, lo que ayuda a relajar el cuerpo y la mente y a elevar el estado de ánimo, incluso si la ingesta es de la variedad libre de alcohol.
A las embarazadas se les recomienda el consumo de uno a dos vasos de cerveza al día, o con menor regularidad, puesto que esta bebida mejora la calidad de la leche. Sus propiedades antioxidantes se transfieren al alimento del bebé, mejorando no sólo su calidad sino también aumentando su producción. Esto, a su vez, "carga" a la leche materna de las propiedades beneficiales mencionadas, las cuales ayudan al desarrollo de bebés más saludables y protegidos. Por responsabilidad, la mujer puede optar, durante el embarazo y la lactancia, por el consumo de cerveza sin alcohol.
La advertencia de siempre
Que la cerveza tenga aportes beneficiales para la salud no excusa la regla de prevención número uno: siempre beber con moderación. Medio vaso de cerveza ya te dará los aportes que hemos visto, y recuerda que el verdadero disfrute está en un consumo moderado sin excederte.