Las 5 villanas más inolvidables de las telenovelas

Alguna vez una actriz aseguró que lo más divertido en la actuación era interpretar a villanos… Esos que en las telenovelas se encargar de hacerle la vida de cuadritos a la protagonista, al protagonista y a todos los que lo rodean.

Y es que en una buena telenovela debe haber un buen villano, aunque la misma frase sea contradictoria.

Son ellos, los personajes malvados, los que de alguna u otra forma le dan vida a la historia de amor… Porque, ¿qué sería de una telenovela sin suficientes obstáculos entre los protagonistas?

He aquí nuestras 5 villanas favoritas de telenovela.

Soraya Montenegro: ¿Cómo olvidarla? ¿Acaso alguien no recuerda a Itati Cantoral gritando desde el capítulo número uno? Su odio por María la del Barrio, interpretado por Thalía, fue tal que la llevó a estar recluida por años en un hospital de Houston mientras se recuperaba de una caida desde un edificio. Por años su deseo de vengarse fue su único motivo para poder superar el ser inválida y poder caminar nuevamente. Exageradamente malévola, hasta el punto de dar risa… “¡Maldita lisiada!, basurera, escuincla babosa”, fueron algunos de sus sonoros insultos antes de que muriera quemada en un incendio que ella preparó para que originalmente muriera María la del Barrio.

Catalina Creel: Para muchos, la madre de todas las villanas las telenovelas. Interpretado por María Rubio en Cuna de Lobos, Catalina, quien lucía un intrigante parche en el ojo, además de villana era una asesina en serie, capaz de llevarse a cualquiera por el medio. Sin miramientos planeaba y ejecutaba la muerte de sus enemigos, incluyendo la de uno de sus hijos y su esposo. Era autora intelectual y material de todas sus fechorías, que las realizaba disfrazándose con una peluca amarilla y lentes negros.

Angélica de Santibáñez: Aunque su maldad no era insólita, la villana de Marimar, interpretada por Chantal Andere, protagonizó una de las escenas más recordadas de las telenovelas de los 90. Angélica obligó a la desvalida Marimar a recoger del fango, con la boca, una pulsera de oro, esto como prueba de amor hacia su hijastro Sergio Santibáñez, de quien Marímar estaba perdidamente enamorada. La pobre mujer así lo hizo, y luego fue a parar en la cárcel acusada, por la misma Angélica, de haberse robado la joya.

Rubí: Interpretada por la hermosa Bárbara Mori, Rubi fue una mujer muy bella que hizo hasta lo imposible por salir de la pobreza. Traicionó al amor de su vida y muchas veces lo humilló por ser pobre, traicionó a su mejor amiga quitandole a su prometido durante su boda, y le hizo la vida imposible a ella y a muchas personas. Ambiciosa y muy calculadora, Rubí no era la antagonista de la telenovela… ¡Era la protagonista!

La Diabla: De la popular y polémica telenovela Sin Tetas no hay Paraíso, interpretada magistralmente por Sandra Beltrán, llega una villana con un lado muy humano. Sus maldades era producto de su ambición. Introdujo al mundo de la prostitución a la protagonista, luego la traicionó y se quedó con el hombre.

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