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La más nítida expresión de un gobierno sin luz, decadente, sumido en una tenebrosa opacidad moral e intelectual, es el reciente apagón que se extendió en 12 estados del país. Nunca antes tuvo tanta vigencia aquella frase de El Libertador: “Moral y luces son nuestras primeras necesidades”. Y lo inmoral de este gobierno no está solo referido a la voraz corrupción que carcome los cimientos de la República y alcanza niveles obscenos en las “cúpulas podridas” del proceso. Sino que la relación de la élite gobernante con los venezolanos es humillante, tratando al pueblo como borregos e ignorantes, subestimando permanentemente su inteligencia, aprovechándose de sus necesidades y burlando sus esperanzas. La mentira es su principal herramienta, signo de sus carencias éticas y de la ausencia de valores, lo cual ha hecho metástasis en el gobierno y amenaza con extenderse –mas aun- en la sociedad venezolana.
Nadie les cree la excusa trillada del sabotaje eléctrico como causa del apagón, tal subterfugio es “cuchillo pa´su garganta”. Si alguien les creyera, tendría necesariamente que concluir que es un gobierno muy inepto pues tiene 14 años hablando de sabotaje y nunca ha podido aplicar correctivos, señalar a algún culpable o mostrar pruebas, limitándose únicamente a repetir la ridícula excentricidad de responsabilizar al imperio, la oligarquía, el capitalismo, la derecha, bla, bla. Además, si aún militarizando el sistema eléctrico le hacen sabotaje, entonces –a juicio del gobierno- los militares son unos incompetentes o son cómplices del boicot. Por primera vez, la culpa no sería de la CIA sino de la FAN. Si a pesar de lo disparatado de su coartada, usted insiste en creerle al gobierno, entonces terminará convencido que no debe ser tan escuálida y majunche una oposición que es capaz de derrotar a la poderosa “Revolución Bolivariana”, burlando el cerco militar y enfrentando a las milicias populares que tanto cacarea la cúpula estafadora. Por donde lo vea, el tiro le sale por la culata!
En fin -igual que el magnicidio o la supuesta lucha contra la corrupción- todo el lloriqueo sobre el sabotaje no hace mas que evidenciar la enorme fragilidad de este gobierno ilegítimo, su carencia de gestión y la pobreza de sus argumentos. Su dramatismo es constancia de la inestabilidad política que se respira en Venezuela, pues hasta en Nueva York se han producido apagones y no se ha caído el gobierno norteamericano. Así que gracias al llantén de Nicolás y su banda, uno puede inferir que deben sentirse extremadamente débil, si piensan que la oposición puede derrocarlos con un apagón. Pues no, nuestra ruta es democrática y la verdad es que todo el mundo sabe las reales causas del colapso eléctrico. Si Jessie Chacón tuviera algo de decencia, renunciaría como ofreció. Si este gobierno tuviera un ápice de dignidad, asumiera su responsabilidad. Pero no pidamos peras al olmo…. Nos vemos el 8D.
@richcasanova / Richard Casanova.