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Phyllis Cook, caminó por el pasillo con una falda y una blusa elegante para casarse con su novio John Plommer de 86 años de edad.
Phyllis pensó que su última oportunidad de tener pareja había terminado en el 2008 cuando murió su novio de toda la vida. Nunca llegó a casarse porque sus padres no habían estado de acuerdo con su romance. Fue entonces hace un año cuando ella se trasladó a una vivienda tutelada a causa de una caída en su casa, y fue allí en donde conoció a John que también se encontraba alojado en el lugar.
El agricultor jubilado se había casado anteriormente dos veces, pero su segunda esposa murió hace un año, asi lo reseña lapatilla.com
Hace dos meses se comprometieron y ahora se casaron frente a 23 invitados.
El verdadero amor
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La pareja luego de un año conociendose, se mudaron a una vivienda en Mulberry Corte.
Phyllis caminaba acompañado por el pasillo de la iglesia de St Mildred, Canterbury el viernes pasado. Para su sorpresa y deleite su hermana Yvonne Lane, voló desde Canadá para la ocasión.
Los recién casados, que viven en la misma vivienda en Canterbury, ya están en su luna de miel en Gales. Pero antes de partir Phyllis expresó su agrado por la ceremonia, “Fue un buen servicio”. Teníamos muchos amigos allí. No tenemos 21 años, pero ambos hemos hecho amigos por todo el mundo a lo largo de nuestras vidas.
John dijo: “Perdí a mi segunda esposa en marzo de 2012 y no podía cuidar de nuestro bungalow y casas de campo por mi cuenta, así que encontré un piso aquí. Phyllis y yo nos ayudamos mutuamente. Espero que nuestro matrimonio nos traiga amistad, felicidad y compañerismo”. Además dijo que “No todo el mundo quiere volver a casarse, pero nosotros nos apoyamos el uno al otro.
Entre los invitados a la ceremonia también estaba el hijo de Jhon, Geoff, con su esposa y sus dos hijos Damián y Kyle.
Geoff dijo: “Fue un día precioso para nosotros. Nos quedamos encantados cuando nos enteramos de la noticia.”Es bueno para ellos tener compañerismo. Papá dijo que era el mejor regalo de Navidad que jamás haya tenido.
Romero Berger, que dirige el alojamiento Tribunal Mulberry, dijo: “Esta es la primera boda que hemos tenido y ha sido genial. Me siento muy contento por ellos. Cuando Juan llegó aquí, él dijo: “¿crees que voy a encontrar mi tercera esposa aquí? Ellos han encontrado la felicidad, eso es maravilloso.”