Polos opuestos: ¿Buenas relaciones?

Muchas veces hemos escuchado la mítica frase de «los polos opuestos se atraen», unas palabras cuya veracidad hemos comprobado en muchas ocasiones pero que, sin embargo, no perdura cuando se trata de consolidar una relación que habría sido mejor de iniciar con un polo similar.

Descubramos si la unión del norte y el sur, la noche y el día o cualquier pareja de polos opuestos conlleva una buena relación.

Cuando el respeto es el ecuador

En ciencia, la teoría de que los polos opuestos se atraen está más que confirmada. Una fuerza que poseído en más de una ocasión en la que hemos iniciado un pasional idilio con una persona que es totalmente opuesta a nosotros. Yo soy tímida, pero él es extrovertido, yo ordenada, él espontáneo y aventurero.

Más que los polos opuestos, lo que suele gustarnos es lo diferente en ciertas ocasiones, y es en ese momento cuando la famosa frase se manifiesta y creemos en todos los mitos habidos y por haber. Fluye el éxtasis y la pasión, «el amor» y el presente, pero cuando debemos continuar, en el cuento comienzan a crecer malas hierbas. Sí, suele pasar con los polos opuestos.

En un sentido más práctico y quizás menos metafórico, la relación entre dos polos opuestos surge entre dos personas que buscan algo completamente diferente como complemento y motivación. Esto es perfecto. Sin embargo, una vez el amor pasional del principio se transforma, pasamos a esa rutina o situación estática en la que comenzamos a hacer planes de futuro, planificar nuestra agenda, presentar a nuestra pareja a nuestros amigos, etc…  y tu pareja opina todo lo contrario: prefiere seguir con sus viajes por el mundo, no pensar en el futuro y mantener a sus amigos aislados de ti.

Estos problemas, si bien pueden estar algo camuflados durante la etapa de soltería, estallan tras la boda, y todas esas pequeñas cosas que no encajaban comienzan a ser más grandes. Si, para colmo, el sexo falla, lo cual suele ser una base importante en este tipo de relaciones, el cuento se desploma y nos repetimos esa otra famosa frase de «Nunca aprenderé». O, posiblemente, también te preguntes por qué siempre acabas con el mismo tipo de chico.

¿Cómo hacer que funcione una relación de opuestos?

En otras situaciones, tener una relación con alguien opuesto a nosotros puede ser posible si se respetan y aceptan los objetivos de cada uno, si se dialoga y discute en el buen sentido. Con el respeto y la comunicación toda relación puede ser posible y conducirnos a ese nivel en el que, aún teniendo puntos de vista diferentes, la relación con esa persona es posible y acabas queriendo y aceptándole tal y como es.

La pasión suele ser para los polos opuestos y las relaciones más duraderas para personas con conductas más afines para construir algo con firmeza, sin dudas, con decisión. Pero también es cierto que existiendo ciertas pautas esenciales y un mínimo de respeto y comunicación en la pareja, toda relación es posible.

¿Los polos opuestos se atraen? Puede, pero la cuestión es saber resolver la relación una vez ha pasado el enamoramiento inicial.

Que los polos opuestos se atraen es una verdad que no podemos obviar. Sin embargo, la atracción muchas veces debe obedecer a otras cosas si queremos llevar a acabo una relación sólida. Mediante el respeto y la comunicación todo es posible, pudiendo encontrarnos en esa relación que nunca esperamos pero que aceptamos, o en una pareja que, definitivamente, no coincide en nada con nosotros a la hora de manejar la relación.

Y tú, ¿sueles sentirte atraída siempre por los polos opuestos?

Fuente [Imujer.com]