Si iba a conquistar el mundo, por qué no hacerlo desde uno de los distritos más populares del mundo. Seguro eso pensó Hilter cuando mandó a construir una residencia en Hollywood. Un rancho desde el cual poder controlar el planeta. Esto era parte de un plan secreto si es que ganaba la Segunda Guerra Mundial, explica elcomercio.pe
De acuerdo con el sitio mencionado, por medio de Herr Schmidt, un espía alemán de la década de los treinta, que en ese entonces vivía en Los Ángeles, California, el líder de los nazis había planeado irse a vivir a Hollywood cuando ganara la guerra, para, desde ese lugar, plácidamente contemplar el imperio que trataba de crear.
Para hacer realidad el "sueño" del führer, Shmidt se dedicó a engañar. Y es que según explicalainformacion.com, lo que en realidad pasó es que el espía llegó con una pareja de estadounidenses, los Stephens, para venderles precisamente la idea de que Hitler iba a ganar la guerra y quería irse a vivir a los Estados Unidos.
Shmidt aseguraba tener poderes sobrenaturales y que éstos le hacían ver el futuro y le habían ya anunciado la derrota del ejército de Estados Unidos y países aliados ante la Alemania Nazi. Aunque los poderes que en realidad tenía el supuesto espía eran sólo para el embuste.
Desafortunadamente, como los Stephens eran adeptos "del más allá", creyeron cada palabra del espía del Tercer Reich y se pusieron a su disposición. La pareja, asustada ante el poder alemán, decidió "abrazar la causa filonazi" y compraron una finca de más de 20 hectáreas, muy cerca del famoso cartel de Hollywood, al vaquero humorista Will Rogers. Le llamaron "El Rancho Murphy".
Así fue como en 1933, los Stephens decidieron invertir, además de en el terreno, alrededor de unos 70 millones de dólares actuales, en construir un enorme palacio. Una residencia que no era como cualquier otra, pues estaba diseñada para dar gran seguridad y lujo.
Contaba con 20 habitaciones, un sofisticado bunker a prueba de bombas, una planta de suministro eléctrico y un tanque de depuración de agua para más de un millón de litros, explicapijamasurf.com, página que indica que la existencia de esta mansión se descubrió a través de un reportaje de Travel Channel.
Se dio a conocer que en los planos, diseñado por el afamado arquitecto de la época Paul Revere Williams (afroamericano; lo que resultaba una paradoja), había cinco bibliotecas, una piscina lo suficientemente grande como para invitar a nadar a los vecinos, salas de convenciones y un gimnasio. Se supone que todo eso se terminaría de hacer cuando llegara un dinero de Alemania, pero ese nunca apareció.
Y es que "el rancho Murphy estaba pensado para convertirse en el bastión del fascismo estadounidense desde el que Hitler dominaría el mundo", dijo Randy Young, historiador.
Sin embargo, y a pesar de los grandes planes que había y lo que ya se había construido, el 8 de diciembre de 1941, todo se vino abajo. Fue justo después del ataque a Pearl Harbor, cuando el FBI se enteró de los siniestros planes de la casa para el dictador, así que decidió actuar y llegó de inmediato a Hollywood a detener a 50 personas que se encontraban trabajando en crear el imperio nazi.
Resulta que no fue que se enteraran de sorpresa, sino que la policía ya llevaba meses siguiendo la pista de la supuesta base de Hitler; así que ese día Herr Schmidt fue arrestado, acusado de espionaje y sentenciado a cadena perpetua.
Al sorprender a todos, la construcción de la casa se vino abajo, pues el matrimonio Stephens había quedado en la ruina, por lo que tuvieron que vender el lugar. Éste pasó a ser parte de la Fundación Huntington Hartford, que convirtió el palacio en una casa de asistencia para artistas y personajes del cine.
Hasta 1973 se mantuvo así, pero luego ya no pudieron seguir manteniéndola y las autoridades de Los Ángeles la compraron por una cantidad de dinero que en realidad fue simbólica. Para 1978, un incendio que inició en el cañón Mandeville destruyó casi todo el rancho. Desde ese entonces, parece que la casa de Hitler quedó olvidada.
Hoy, a casi 80 años de que inició su construcción, es sólo un lugar abandonado que ha sido decorado con grafitis y hasta con algunas esvásticas. Como dato curioso, esta casa está ubicada junto a la vivienda de Steven Spielberg.