Dennis Avner apareció muerto el 5 de noviembre en Las Vegas, lugar en el que desarrollaba su labor de transformista. Recién este viernes se conoció su deceso pero no se informó cuál fue la causa. Sin embargo, trascendió que se habría suicidado.
Desde los 23 años este ex marín estadounidense comenzó a realizarse transformaciones en su cuerpo para que su fisonomía fuera cada vez más parecida a la de un felino.
Los cambios incluyeron lentes de contacto, perfraciones con piercings, tatuajes en el rostro y otras partes de su cuerpo, implantes dentales y uñas postizas.