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Los productos light y diet surgieron en la década del ’80 y desde allí generaron una gran confusión que muy pocos se interesaron en aclarar.
Las dudas han llevado a que actualmente se relacionen los términos ‘dietético’, ‘light’ y ‘diet’ con alimentos pensados para planes de adelgazamiento, cuando en realidad no siempre es así.
Ravenna explica que «un alimento es dietético cuando tiene disminuido, al menos en un treinta por ciento, por debajo del límite establecido, alguno de sus componentes; con lo cual un producto puede ser bajo en sodio, pero no en azúcar, con lo cual no necesariamente tendrá menos calorías».
«De este modo, no todos los productos diet tienen menos calorías que los comunes» dijo el especialista y dio un ejemplo claro «si un alimento no contiene azúcar, pero presenta grandes cantidades de grasa, se lo considera dietético aunque presente una cantidad de calorías similar a su equivalente no dietético».
Con respecto a lo «light» el también psicoterapeuta aclaró que «se lo considera así cuando presenta una reducción de, al menos, un veinticinco por ciento de su valor calórico en relación a su homónimo no light» y alertó que «cuando se adquiere un producto light no estamos comprando un producto que no engorde, sino uno cuyo aporte calórico es menor».
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En otro sentido, Ravenna también destacó que es importante ser consciente de que «es un error sobrepasarse en la ingesta de productos reducidos en calorías pensando que no engordan porque muchas veces repitiendo una porción light se ingresan, sin saberlo, más calorías que comiendo un alimento común» y sentenció «el riego de los light es que uno se siente inmunizado de engordar y no es así porque hasta la lechuga engorda si uno la come en exceso».
[Fuente: derf.com.ar]