Un estudio publicado por científicos de la Universidad de Granada concluye que las personas nacidas en invierno tienen más probabilidades de sufrir esquizofrenia cuando son adultos. Esto esta relacionado con la falta de vitamina D.
Los científicos recopilaron los datos de más de 300 personas que se encontraban hospitalizadas entre 1998 y 2006, observando que una gran proporción de los pacientes esquizofrénicos cumplía años durante el invierno, debido a las restricciones alimenticias del existe en esta época.
Según los autores, estos resultados se explicarían por déficits nutricionales. Durante el invierno hay menos horas de luz solar y el cuerpo produce menor cantidad de victimina D, cuya carencia está relacionada con el desarrollo de la enfermedad. Este hecho también podría explicar la mayor cantidad de esquizofrénicos en los países del norte. Además, otros estudios han demostrado que cuando la madre tiene un peso bajo y déficits nutricionales, el niño tiene mayor probabilidad de sufrir esta enfermedad mental.
"El mayor riesgo podría ser un efecto de diversos agentes ambientales que actúen durante la gestación, tales como complicaciones obstétricas, infecciones virales (en particular durante el segundo trimestre de embarazo) o déficits nutricionales" ha explicado a SINC José María Martínez Ortega, uno de los autores.
Este trabajo amplía el estudio realizado por investigadores de la Universidad Vanderbilt en Tennessee (EE UU) que analizó la relación entre la alteración del reloj biológico y la fecha de nacimiento.