Antonio Barreto Sira: Bases oficialistas también se cansan de las promesas rotas

“El pueblo de Barcelona, el de toda Anzoátegui, no se come más cuentos chinos y promesas rotas de un gobierno que ha perdido toda legitimidad nacional y regional. Con pancartas, camisas rojas, afiches alusivos al oficialismo, sus propios simpatizantes no aceptan más engaño, ilusiones o palabras que se las lleva el viento”, así lo expresó el diputado a la Asamblea Nacional (AN) por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Antonio Barreto Sira, a raíz de la protesta que incomunicó la zona sur de la capital estadal con el resto del área metropolitana.

El legislador anzoateguiense indicó que existe una indignación del pueblo cada vez más profunda ante la incapacidad de una gestión que “ofrece y no cumple y cuando lo hace, lo hace a medias”.

Barreto Sira comentó que la llamada Gran Misión Vivienda no es grande, no es misión y lo que menos puede ser es vivienda, porque el déficit de soluciones habitaciones se mantienen en niveles astronómicos.

Señaló que los representantes del denominado campamento “Pioneros del Libertador”, núcleo organizado que encabezó las protestas, son una muestra viva de la incapacidad oficial en la construcción de viviendas debido a que ellos mismos admiten que llevan ocho años esperando que el Ejecutivo dé inicio al complejo habitacional prometido por los gobernantes rojos, rojitos.

Esta realidad -continuó- no es exclusiva de Barcelona, sino que los portocruzanos, los guanteños, los anaquenses, los piriteños, todos y cada uno de los anzoatiguenses la padecen en carne propia, “cuántas familias viven aún rejuntadas bajo un solo techo; como los que están en el gobierno no tienen estos problemas no saben que el pueblo, los trabajadores, los nuevos profesionales, pasan las de Caín para conseguir una casa para vivir”.

Expresó que los venezolanos a pesar de la bonanza petrolera, los anzoatiguenses a pesar que viven sobre un suelo inundado de petróleo y de diversos recursos naturales, como el gas, son miles que aún viven como decía Alí Primera “bajos techos de cartón”.

El parlamentario aseveró que la crisis habitacional perjudica a todos por igual, “lo único equitativo en este sistema actual son los problemas, aquí los que piensan de una forma u otra sufren por la escasez, por el desabastecimiento, al pesuvista de a pie se le va la luz como al opositor, y la falta de hogares dignos es una tragedia que golpe sin discriminación alguna”.

Llamó a la reflexión a las autoridades nacionales y regionales para que observen que son sus mismos seguidores los que ya no aguantan “tanta cháchara y poca acción”.

“Espero que mañana no digan que las manifestaciones populares son orquestadas por opositores o por agentes de la CIA, quienes vestidos de rojos estaban protestando para sabotear al Gobierno; para nada, asuman sus responsabilidades, hagan un mea culpa y admitan que el tema habitacional ha sido manejado bajo un esquema poco efectivo que mantiene insatisfecho al grueso de la población que aspira a un hogar propio, digno y seguro”, advirtió.

Olla de presión

El vocero de la unidad democrática expresó que la carencia de un gobierno que sea efectivo en la solución de los problemas es la raíz de los males que se vienen agudizando día a día en el país.

Venezuela es una olla de presión -prosiguió- donde las políticas de Nicolás y los demás enchufados tapan deliberadamente las válvulas de escape, lo que provocaría “tarde o temprano una explosión del pueblo”.

[Fuente: Prensa Mesa de la Unidad]