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El ayatollah Alí Khamenei aprobó una alianza militar con los Estados Unidos para detener el avance de las fuerzas del Estado Islámico en el norte de Irak. La noticia, propalada por la BBC, fue revelada a ese medio por «fuentes de Teherán».
Según esta versión, Khamenei -cuya cuenta de Twitter no ha hecho referencia alguna al tema- «ha autorizado a su comandante en jefe a coordinar operaciones militares con los Estados Unidos, Irak y las fuerzas kurdas».
Irán es un país musulmán chiíta que considera al Estado Islámico, sunita, como una seria amenaza. De todos modos, es llamativo que Teherán, que siempre ha criticado la intervención del Departamento de Estado en Irak, ahora acepte estas operaciones.
Después de la audaz ofensiva de ISIS en junio y julio, tropas iraquíes y fuerzas kurdas comenzaron a recibir apoyo de los Estados Unidos, mientras que milicias de tribus chíitas nativas de Irak recibieron asistencia de Teherán, en todos los casos para luchar contra los ataques de los extremistas.
Esta inesperada coincidencia de tener un rival común con intenciones de tomar control de todo el mundo musulmán, de recomponer el Imperio Otomano y de lograr sus objetivos a través de métodos sanguinarios parece haber provocado un gran impacto en el régimen teocrático iraní
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En agosto, la asistencia aérea de los EEUU ayudó a las milicias chiítas y las fuerzas kurdas a quebrar el sitio de Amerli, una ciudad chiíta que estaba seriamente amenazada por los radicales.
Las fuentes de BBC sostienen que Khamenei autorizó a Qasem Soleimani, comandante de la fuerzas Quds -brazo extraterritorial de la Armada Revolucionaria- a trabajar en conjunto con las fuerzas que luchan contra ISIS, incluyendo a las de los EEUU.
Fuente [Infobae.com]