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Motorola ganó una disputa legal contra Microsoft en Alemania, lo que podría implicar el bloqueo de la distribución y venta de Windows 7, Internet Explorer, Media Player y de la Xbox en el país.
Se trata de un caso polémico, que llevó a Microsoft a ordenar el cambio el mes pasado su sede de distribución europea desde Alemania a Holanda. Según la corte regional de Mannheim, Microsoft viola patentes relacionadas a estándares de la industria para compresión de video (H.264 específicamente, usado casi por el 80% del video digital del mundo). El problema está en que esas patentes son, precisamente, estándares de la industria, lo que significa que su dueño está obligado a cobrar un precio “justo, razonable y no discriminatorio” por el uso de las mismas.
Microsoft alega que Motorola está abusando. Lo cierto es que la demanda se enmarca de un esfuerzo global de varias compañías por conseguir más ingresos de la venta de dispositivos móviles. La propia Microsoft ha convencido a varios fabricantes de equipos Android de que les pague a ellos por el uso de patentes, generando así ingresos por la venta de dispositivos con el sistema operativo de Google.
Microsoft anunció que apelará la decisión de la corte, afirmando que está confiado en que “Motorola se apegará eventualmente a su promesa de hacer que las patentes esenciales estén disponibles en términos justos y razonables”.
También Apple ha estado discutiendo con Motorola por estas mismas patentes en Alemania. Motorola quiere que se le pague un 2,25% del precio de venta de los productos que incorporen sus patentes, algo que según las empresas no es razonable.
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Microsoft ganó un juicio en Estados Unidos anteriormente que prohíbe a Motorola tomar medidas para banear la venta de productos en el mercado alemán hasta que se desarrolle un juicio en EE.UU. al respecto, por lo que la existencia de Xbox en el país germano se encuentra a salvo por ahora. También Motorola deberá enfrentarse al escrutinio de la Comisión Europea, que investigará este tema para determinar si la compañía adquirida por Google está atentando contra las leyes antimonopolio en el viejo continente.