«Crónica de un océano humano», por @jdsolorzano

Las banderas acariciaban la brisa que soplaba tenuemente cerro arriba en Puerto La Cruz. Los rostros estaban como iluminados, llenos de esperanzas y con una alegría que como mar picado salía de su cauce y desbordaba a todos aquellos que pasaran por aquel lugar.

Al son de un ritmo incesante de campaña, al ritmo de la emoción de hombres y mujeres, así fueron llegando más y más portocruzanos al encuentro con su próximo alcalde. Así se dibujaba una escena de ferviente frenesí entre los presentes.

Poco a poco los coordinadores de centro, los candidatos a concejales, los representantes de los partidos políticos arribaron a aquel sitio; los portocruzanos presentes ya no se podían mover con facilidad, en breve la meta fue alcanzada y enseguida superada con creces.

En medio de la euforia característica de los equipos ganadores: ¡Llegó!

Caminando en medio de aquella muchedumbre, desde el fondo de la concentración, apareció saludando y recibiendo muestras de afecto el líder de todo aquel enjambre de pueblo: Marcos Figueroa.

Al lado con su pueblo, en compañía con los candidatos a concejales, Marcos emprendió la caminata. El Mirador de Pozuelos fue el punto de partida, recorrió Pozuelos, La Caraqueña, Tierra Adentro y Pueblo Nuevo rodeado de un río humano que caminó con energía, esperanza y con fuerza victoriosa.

Durante la caminata fueron centenas las personas que salieron al encuentro del próximo alcalde, fueron muchos que en breves instantes lograron tomarse una foto con él, fueron miles las manos agitadas con sentimiento verdadero que lo saludaban.

Marcos seguía expresando con gestos y palabras su compromiso con cada uno de los portocruzanos. Al principio algunos puntos “rojos” colocados en la ruta de la marcha causaron preocupación para los organizadores del evento, sin embargo esto no fue, ni será, obstáculo para quienes marchan con la verdad y la sinceridad por delante.

Paso a paso, con el océano de pueblo detrás de él, Marcos siguió y siguió, saludó con aprecio a aquellos seguidores del expresidente Chávez, que aunque siguen recordando y apreciando a su desaparecido líder saben muy bien que la ciudad necesita un gerente que conozca el barrio y que solucione desde ya los problemas de todos.

Al llegar al punto culminante la de la marcha, era incontable la cantidad de personas que estaban presentes. Eran mucho más de los que habían salido del Mirador, se habían sumado emocionados unas decenas más de seguidores del cambio.

Con firmeza y bondad, Marcos agradeció a todos los marchistas su apoyo y compromiso, y reafirmó rápidamente que el rescate de Puerto La Cruz arrancó desde Ya, gracias a ellos mismo que están firmemente convencidos en ir votar por el cambio este 8 de diciembre.

Al término de aquella manifestación de porvenir, hombres y mujeres, jóvenes y adultos mayores coincidieron en que: “El pueblo está listo, ahora falta salir a votar y rescatar al municipio”.

Durante la Mega Caminata se demostró que juntos ganamos todos, se evidenció que unidos se alcanzan los objetivos y se obtienen buenos frutos; por eso felicito a Marcos, y a mis compañeros aspirantes a concejales: Luis Barrios, Miguel Azocar, Marcos Alcalá, Jorge Oriad, por la lista, los nominales: Antonio Acosta, Beatriz Pérez Blanco, por la parroquia Puerto La Cruz; Carlos Bolívar, Carlos Hernández, Astrid Silvestri por la parroquia Pozuelos, y sin poder dejar por fuera a Emelinda Betancourt, Carolina Rincones, Narciso Carpio, Carlos García y Jesús Zamora, ¡A todos enhorabuena!

Y para culminar esta pequeña crónica sólo diré, como dice el buen amigo Raúl, aquello fue: IMPRESIONANTE.

[Fuente: José Dionisio Solórzano /@jdsolorzano]