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Uno de los pasos más firmes que se pueden dar en contra de alguna acción es cortar su fuente de financiamiento. Es lo que han buscado muchos gobiernos cuando intentan combatir al crimen organizado o lo que se llega a hacer en algunas empresas ante un proyecto desastroso. En Estados Unidos, la Cámara de Representantes ha optado por esta vía en lo que se refiere a las actividades de vigilancia masiva de la NSA, según refiere Wired.
La disposición, que fue aprobada por este organismo con 293 votos a favor y 123 en contra, modificó la ley de asignaciones del Departamento de Defensa. Esta reforma se enfoca principalmente en limitar dos conductas de la agencia:
-Las búsquedas de datos de vigilancia recolectados entre ciudadanos estadounidenses
-Las solicitudes realizadas a desarrolladores de software y hardware para dejar puertas traseras en sus programas y equipos para facilitar la intervención de la NSA
Para muchos, se trata de un paso a favor de la privacidad de los usuarios de Internet a nivel global. Ejemplo de esto son las declaraciones del activista de la Electronic Frontier Foundation, Parker Higgins, para quien la reforma representa una señal positiva.
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“Se trata de una declaración inequívoca de que hay voluntad política para hacer algo acerca del espionaje desenfrenado de la NSA. No es un tema trivial. Estos programas de vigilancia necesitan dinero para sobrevivir. Sin él, hay preguntas difíciles para la NSA”.
No obstante lo positivo de esta votación, el profesor de la Universidad de Pensilvania, Matt Blaze, apunta hacia un hecho que es necesario reforzar. Para él, no basta con limitar a la NSA, sino también a otras agencias pertenecientes al gobierno estadounidense que pudieran cometer los mismos excesos:
“El objeto es claramente importante. Me preocupa que el alcance es limitado. Incluso cuando la NSA y la CIA no soliciten ni presionen a los proveedores para incorporar puertas traseras, otras agencias, como el FBI, pueden estar en la misma cuestión”.
Medidas de este tipo contribuirán de manera positiva en el intento por restaurar la confianza de los actores del ecosistema de Internet. Las revelaciones de Edward Snowden contribuyeron a aumentar la transparencia en torno a la vigilancia masiva del gobierno de Estados Unidos, pero de paso dañaron la imagen de otros actores involucrados, como las grandes firmas tecnológicas estadounidenses. El camino por recorrer para restaurar la confianza es largo aún.
Fuente [fayerwayer.com]