Cuando al reportero japonés Toya Chiba se le preguntó por su trabajo para investigar los daños causados por el terremoto de la ciudad portuaria de Kamaishi sabían que no iba a ser sólo otro día en la oficina.
Pero nunca podrían haber imaginado o adivinado cuán cerca de la acción estuvo Chiba y con lo que iban a conseguir.
Esta secuencia de increíble imágenes, tomadas por la cámara de un edificio cercano de circuito cerrado de televisión, muestra las increíbles pericias de Toya para escapar después de que se encontró de repente a merced de las furiosas aguas.
Toya, un reportero del periódico de Iwate Tokai, fue tomando fotografías en la desembocadura del río Owatari cuando, sin previo aviso, el tsunami golpeó llevándose todo a su paso.
Al principio Toya trató desesperadamente de aferrarse a una cabina telefónica, pero cuando fue barrida se encontraba totalmente a merced de los elementos.
A medida que pasaba el tiempo ya no se podía hacer nada por él y por poco fue aplastado ya que tenía carros a cada lado.
Sorprendentemente, a pesar de estar hasta el cuello en el torrente de agua, el profesional dedicado se ve con su cámara, sin dejar de tomar fotos.
Increíblemente sobrevivió con sólo unos cortes y magulladuras leves tras ser arrastrado durante unos 30 metros antes de encontrar un lugar de tierra seca.
Por desgracia, se cree que sus esfuerzos fueron en vano ya que la cámara fotográfica quedo muy dañada por el agua.
El terremoto y el tsunami han dejado 13.456 muertos y un desaparecido 14.851. Más de 150.000 han quedado sin hogar.