Todos amamos las conexiones Wi-Fi, sobre todo cuando son gratuitas, pero ¿sabemos cómo funciona? Se trata de un campo de energía que se transmite en forma de ondas, con una distancia, velocidad y altura entre ellas determinada; mucho más corta que las ondas de radio y más largas que las de microondas, para que así no pueda ser interrumpido por otras señales.
La banda de transmisión única que tienen las ondas Wi-Fi fue construida para que no existan interrupciones, así que ésta se divide en diferentes subcanales para llevar la información. Es entonces, una antena equipada con un protocolo de transmisión que divide la banda de frecuencia en varios segmentos o canales, para que así los datos puedan ser transmitidos por cada canal independiente, enviando y recibiendo información a una velocidad mucho más alta.
Además, los campos Wi-Fi generalmente tienen una forma esférica o elipsoidal y se extienden de 20 a 30 metros, generalmente. Así las ondas Wi-Fi viajan como ondas codificadas, a diferentes frecuencias, al mismo tiempo.
Las cajas o enrutadores, suelen proyectar su señal a poco más de 90 metros de distancia, desde su ubicación, así que elementos como árboles o paredes sí pueden obstruir la señal. ¿Te ha pasado? Lo recomendable es colocar cajas Wi-Fi en diferentes puntos, creando un campo que se extienda por todo el lugar que queramos. Claro, si es que es posible; sino, será mejor sólo estar cerca de la caja.
Pero, ¿te imaginas como son las ondas Wi-Fi? Eso sí que sería difícil de explicar, pero no de mostrar; te presentamos la siguiente galería de cómo se ven las ondas Wi-Fi en el mundo y así puedas imaginarte cómo se ve cerca de donde hay internet.
Fuente: de10.mx