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El anuncio por parte del Gobierno nacional de liberar a casi la mitad de los reclusos penitenciarios que se encuentra en situación de hacinamiento en las diferentes cárceles del país, abre la posibilidad de que aumente la criminalidad en todas las regiones del país.
.Entre los elementos que han contribuido a empeorar la situación carcelaria se encuentra la ineficacia por parte del nivel central de elaborar políticas adecuadas de manera de incluir a las gobernaciones y a los diferentes organismos que se preocupan de este problema, así como la falta de construcción de nuevos centros que alberguen a la innumerable comunidad de personas que se encuentra privadas de libertad por retardo procesal y otras razones.
Cerca de 1.200 presos saldrán próximamente del Centro Penitenciario Región Insular, decisión que ha generado alarma entre la comunidad neoespartana, razón por la cual el Ejecutivo regional, en rueda de prensa, manifestó su preocupación, al mismo tiempo que notificó que reforzará sus políticas para la protección de residentes y visitantes.
Víctor Espinoza, secretario general de Gobierno, indicó que esos beneficios que se están otorgando deben ir de la mano de programas de educación de manera de reinsertar a los procesados a la sociedad, basados en un oficio que les permita mejorar su calidad de vida. “Los ministerios de Justicia, de Asuntos Penitenciarios, las gobernaciones y los municipios, todos deben coadyuvar para que en esos centros se eduque la persona y a la vez trabaje cuando salga en libertad”.
En ese orden anunció que la Gobernación pondrá en funcionamiento la Escuela de Oficios que impartirá cursos y talleres a la comunidad en general y al mismo tiempo podrá prestar servicios a los centros de reclusión. La idea es darle una posibilidad al beneficiado de aprender oficios tales como carpintería, albañilería, ebanistería, que le permitan ganarse la vida. Destacó que una mejor coordinación entre los entes nacionales y estadales permitirá alcanzar el objetivo trazado, el que no es otro que garantizar la seguridad en la entidad.
Por su parte, Henry Millán, director de Planificación, destacó que el problema de la inseguridad y la violencia está asociado, y responsabilizó al Gobierno nacional de crear un clima de intolerancia. “Se ha permitido el tráfico de las armas en los barrios, funcionarios del gobierno nacional mantienen discursos agresivos, ahora se aceleran los procesos penales sin análisis exhaustivos, sin tomar en cuenta los términos científicos, no ha habido evaluación profesional”, acotó.
A ello se le suman los elementos de extrema pobreza, la división a través de las conocidas listas que se utilizan para otorgar empleo, todo ello es violencia y la violencia genera inseguridad. Precisó que el país no puede marchar bien con tanta improvisación e incoherencia.
Para enfrentar esa realidad Benito Dumont, jefe de la policía regional(Inepol), subrayó la profundización de las políticas de seguridad de la Gobernación mediante la capacitación del policía, y señaló la reciente gradación de 24 Licenciados en Ciencias Policiales, la creación de la Policía Comunal, y la selección de 200 aspirantes a formarse en la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad.
Anunció el equipamiento de Inepol con la incorporación de 11 nuevas unidades de patrullaje, 20 motocicletas, un camión para el traslado de reos, la entrega de 374 nuevos GPS a taxistas del transporte urbano y pescadores, la colocación de 25 nuevas cámaras de seguridad que se suman a las 75 en servicio para resguardar la protección de los ciudadanos en calles, avenidas y centros comerciales.
“El gobierno de Morel Rodríguez ha logrado disminuir los índices delictivos, según lo comprueban las estadísticas del Ejecutivo nacional. Ponemos el mayor empeño para brindar seguridad en barrios y urbanizaciones, trabajamos con la Guardia Nacional, CICPC, con los sistemas como el Dibise, no hacemos diferencias de ningún tipo para ofrecer protección a todos por igual”, concluyó.
[Fuente: Prensa Gobernación de Nueva Esparta]