Las mujeres no somos ni mucho menos tan complicadas como los hombres se creen. En realidad tanto las mujeres como los hombres tenemos en común el encontrar la felicidad en algunos de estos pequeños placeres.
Comer sin engordar
El egocentrismo de los hombres les lleva pensar que son el centro de nuestra vida. Pero te dieran a elegir entre Brad Pitt y no engordar nunca más, ibas a desterrar las lechugas de tu vida.
De compras y a lo loco
No importa si es ropa, zapatos o velas de colores, las mujeres disfrutamos tanto en un centro comercial como lo odian los hombres. Y no hay nada más satisfactorio, sacando nuestro lado malvado, que verlos sentados y aburridos en un banco cargados de bolsas.
Velas, violines…romance
A nadie le amarga un dulce, y ya sea una primera cita o una sencilla noche romántica con tu pareja, es la mejor forma de hacerte sentir especial.
Pero mejor aún es una tarde con tus amigas
Sólo hay una cosa mejor que una noche con tu novio, y es una tarde con tus amigas para poder quejarte de tu novio a gusto. En el fondo es bueno para la relación.
¡Sorpresa!
Una sorpresa (agradable) siempre es bienvenida. Ya sea un detalle sencillo como un café o un viaje exótico, romper con la rutina siempre se agradece.
Ser una mujer de éxito
Los triunfos profesionales cada vez tienen más peso en nuestra vida, pese a las desigualdades. Recuerda que tienes que saber cómo demostrar tu dignidad en el trabajo.
Fuente [Diariofemenino.com]