Estos meses Windows tendrá menos actualizaciones, pero las pocas que nos lleguen serán muy importantes. Microsoft ha advertido que existe una vulnerabilidad muy grave en Windows 10 y que es extremadamente necesario actualizar el sistema para proteger los dispositivos y nuestros datos.
Ya lo avisaba hace unas semanas Microsoft, por culpa de la pandemia COVID-19 estos meses sólo se lanzarán las actualizaciones que sean imprescindibles, es decir, aquellas que incluyan parches de seguridad para mantener protegidos los ordenadores. De este tipo es la última actualización que ha llegado para corregir una brecha tan peligrosa que ha puesto en alerta al Gobierno de Estados Unidos.
Esta actualización está preparada para corregir varias vulnerabilidades, entre ellas dos que se encuentran en Windows Adobe Type Manager y que afectan a todos los usuarios de Windows 10, exponiéndoles a un hackeo masivo.
Ambas brechas de seguridad se califican como CVE-2020-1020 y CVE-2020-0938 y su condición permitiría a los piratas informáticos ejecutar un código malicioso de forma remota e instalar un malware en documentos o archivos en internet. Lo más importante de estas brechas es que los usuarios prácticamente no deben hacer nada para caer en la trampa.
Para ser víctima de este tipo de ataques no es necesario ni siquiera abrir el documento infectado. Simplemente con la vista previa del documento en el Explorer de Windows ya es suficiente para que el malware se instale en nuestro ordenador.
No se han aportado números concretos de cuántos piratas informáticos se han aprovechado de esta debilidad de Windows 10 hasta ahora. Esta semana se ha lanzado la actualización que corregiría el fallo y bloquearía los ataques. También corrige otros 133 problemas, algunos de ellos calificados por la propia compañía como relevantes para la seguridad de los datos de los clientes y la integridad de los dispositivos.