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La fiebre por los accesorios inteligentes, los llamados wearables en inglés, va cogiendo ritmo poco a poco. Uno de los segmentos más codiciados de esta nueva ola de productos dotados de conexión a Internet, con capacidad de ejecutar aplicaciones y un sinfín de funcionalidades son los smart glasses o gafas inteligentes, popularizadas por Google con sus famosas Glass, aún en desarrollo.
Pues bien, según los últimos datos hechos públicos por la consultora deTI Juniper Research, las smart glasses alcanzarán los 10 millones de unidades vendidas al año en 2018, frente a las 87.000 estimadas para este año.
Juniper destaca en su informe Smart Glasses: Market Prospects 2013-2018 que la caída en precio de este tipo de dispositivos será determinante para su futura expansión y generalización en el mercado. Aunque éste no será el único factor. La consultora asevera en su estudio que para que este tipo de dispositivos wearable alcancen una masa crítica es preciso que no se limiten a ser una pantalla secundaria del smartphone, es decir, deben ser en sí mismos productos de gran valor y que éste lo brinden de forma independiente, por sus propias prestaciones.
Nitin Bhas, analista autor del citado informe, asevera al respecto que «estos dispositivos deben incorporar funcionalidades amigables e intuitivas y capturar la imaginación del público haciendo que esta tecnología sea de uso constante en su rutina diaria».
¿Relojes o gafas inteligentes?
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Está claro que los accesorios inteligentes irán ganando terreno en el mercado pero… ¿cuáles serán los preferidos por los usuarios? En general los analistas apuestan por los relojes como los dispositivos que se popularizarán con mayor rapidez, aunque las gafas inteligentes también tienen fuertes adeptos.
No obstante, indican desde Juniper, la mayor barrera de uso de estos accesorios será la privacidad. No hay que olvidar que tomar una foto o un video con estos wearables es muy fácil sin que el fotografiado o filmado se dé cuenta con los inconvenientes que esto puede generar.
En cuanto a qué sectores adoptarán estas tecnologías con mayor avidez, el primero será el ámbito de consumo, seguido del empresarial y del sector de la sanidad. Es más, la primera generación de aplicaciones como aquellas de comunicación o documentación de vídeo serán en primera instancia utilizadas por el sector sanitario, como ya se ha demostrado con la primera operación quirúrgica retransmitida en el mundo con unas Google Glass y realizada por un prestigioso médico español. Aunque el informe de Juniper indica que el verdadero potencial de las gafas inteligentes llegará cuando surjan apps relacionadas con el diagnóstico de enfermedades, la asistencia y la monitorización quirúrgica.
En el sector empresarial ya existen también compañías que utilizan gafas inteligentes y en concreto apps que van desde la ingeniería hasta la mejora de la logística. Aunque se trata, no obstante, de todo un mundo por desarrollar.
La gran oportunidad de negocio estará, no obstante, en los consumidores finales aunque para ello, señala el analista de Juniper, aún tienen que surgir muchas más apps y hardware que sean atractivos para los futuros usuarios.
[Fuente: tecnoinforme.com]