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Un ambicioso plan británico para buscar formas de vida en un antiguo lago bajo el hielo antártico fue suspendido debido a problemas técnicos que obstaculizaron la ejecución del plan.
La idea era llegar a los sedimentos del lago Ellsworth, que está enterrado bajo tres kilómetros de hielo antártico, buscando formas de vida que pudiesen sobrevivir en un ambiente tan remoto y extremo. También esperaban encontrar conchas marinas, que pudieran ayudar a determinar cuándo fue la última vez que la capa de hielo superior se quebró, y entender cuál es el riesgo de que ello pudiera volver a ocurrir por el cambio climático.
Los británicos no son los únicos tratando de llegar al fondo de un lago bajo hielo antártico. Un equipo de Estados Unidos espera comenzar a perforar el lago Whillans entre enero y febrero de 2013, mientras que Rusia ya ha excavado 3.769 metros de hielo para llegar al lago Vostok y tomar muestras.
El proyecto británico se suspendió luego que los científicos intentaran por 20 horas conectar dos agujeros en el hielo que eran necesarios para el funcionamiento del taladro de agua caliente. Debido al tiempo extra que tomó esta operación – que finalmente no se logró – las reservas de combustible se redujeron a tal nivel que ya no era viable seguir adelante.
Los científicos indicaron que tomará “una temporada o dos” llevarse los equipos de vuelta al Reino Unido para ajustes, y luego el mismo tiempo para volver a llevarlos a la Antártica, por lo que la demora podría implicar unos cuatro o cinco años.
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