Escúchelo, muestre interés por lo que hace y aplique los elogios para compensar su esfuerzo.
Es una preocupación constante para los padres un futuro promisorio y de éxito para sus hijos, pero ¿cómo conseguimos eso si el niño no quiere coger los cuadernos ni los libros? o ¿en qué contexto o ambiente podemos pretender que aprenda?
El psicólogo Augusto Valdivia explica que una forma de motivar al niño a estudiar
es crear un ambiente que lo invite a explorar. “El padre debe separar, como mínimo, 10 minutos diarios para jugar con su hijo, gozar del relax y sosiego que otorgan libertad y generan sonrisas en el pequeño”, sostiene.
La intención es que el chico asocie el contacto adulto con el aprendizaje, la exploración y el placer. Se debe aplicar los elogios de manera juiciosa, para recompensar el esfuerzo del menor. Muestre interés por lo que hizo en la escuela, que le comente algo novedoso que haya aprendido y retroaliméntelo con comentarios genuinos. Con información de trome.pe
El especialista recomienda a los padres que si desean que su hijo lea, el niño debe verlos leer también.