Xbox One y PS4 moverán los juegos a 1080p

Las consolas de próxima generación tienen una clara arquitectura tipo PC, algo que para bien o para mal permite intuir con más facilidad sus limitaciones. Siendo realistas y hablando claro Xbox One monta una GPU de gama media-baja, similar a la HD 7790, mientras que la de PS4 se sitúa entre una HD 7850 y una HD 7870.

Lo expuesto supone, claramente, que ni una ni otra consola dispone de la potencia suficiente para mover juegos en resoluciones 4K (3.840 x 2.160 píxeles), algo que NVIDIA ha vuelto a poner sobre la mesa durante un evento en la GamesCom, donde mostró Splinter Cell Black List corriendo en una GTX TITAN.

Gracias al uso del tope de gama monoGPU de NVIDIA el nuevo Splinter Cell corría con total fluidez a 4K, un imposible para Xbox One y PS4, y es que según NVIDIA las consolas de próxima generación no podrán ir más allá de los 1080p en juegos.

No, no sorprenden las palabras de NVIDIA, nada más conocer las especificaciones de Xbox One y PS4 quedaba bastante claro que el formato 4K les quedaría grande, pero debemos romper una lanza a su favor, y es que la comparación no es del todo justa. Para mover un juego en resolución 4K necesitamos una tarjeta gráfica que, en general, costará casi lo mismo que la consola. Dada su relación precio-especificaciones no podemos pedirles mucho más.

Fuente: muycomputer.com